“Me dijo que los abuelos les hacían ver videos degenerados y la Justicia sigue sin escucharlos”, le dijo la vecina del barrio San José a El Ciudadano. Los padres de su ex pareja, un matrimonio que vive en las afueras de la ciudad, comprometidos.
Tras el hecho denunciado el 22 de julio, se llevaron a cabo las detenciones de los acusados y se dio curso a la investigación. Según la pericia de la Policía Científica, no se probó el ataque sexual en el vehículo. La Fiscalía analiza elevar la causa a juicio.
Carlos Bareuther fue hallado culpable del ataque sexual a una menor de edad. El juez desestimó el planteo de otra de las denunciantes. "Que este cura no tenga paz y que Dios se encargue de él", dijo la madre de la víctima. La pena no será en prisión.
El Gobierno Municipal de Cañuelas emitió un comunicado sobre el agente implicado, Sergio Olivera: “Fue desvinculado en forma inmediata. No se puede ni se debe avalar la presencia de personas señaladas por ejercer violencia sexual”.
Se quebró ante su mamá y contó que no fue la única vez que sufrió los ataques sexuales. Indignada, su progenitora se descargó en las redes sociales contra el acusado, que sigue libre mientras avanza la causa. Ocurrió en el barrio Las Chapitas.
El hecho ocurrió en el interior de un auto a la salida de un boliche, sobre la colectora de la ruta 205. La chica de 22 años realizó la denuncia y en estas horas están declarando los imputados, quienes son comerciantes en la zona céntrica.
El fiscal resaltó las maniobras que realizó el sacerdote Carlos Bareuther al tocar a las menores en una dependencia de la escuela Santa María. El religioso, por su parte, dijo que confía en su inocencia. El 11 de agosto se sabrá el veredicto.
Dos psicólogas declararon vía Zoom y comprometieron a Carlos Bareuther, ex capellán del colegio Santa María de Cañuelas, a quien acusan de propasarse con dos menores. El obispo de Gregorio de Laferrere habló con la madre de una de las víctimas.
Cinco mujeres, jóvenes y adultas, acusan a Matías Blanco de haber vulnerado sus partes íntimas. La Justicia considera que la prueba está debidamente fundamentada.