Fue condenado a 40 años de prisión por abusar de la hija de su ex pareja. La defensa de Miguel Ubaldo Reynoso hizo una presentación a la Cámara bonaerense y declaran nula parte de la sentencia.
La reciente condena de Miguel Ubaldo Reynoso, el ‘Chacal’ del barrio San Esteban, trajo al recuerdo a Josef Fritzl, el ‘Monstruo’ de Austria. Abusaron, esclavizaron y dejaron embarazadas a sus propias hijas.
Lo resolvió la Justicia en un fallo unánime. Miguel Ubaldo Reynoso fue encontrado culpable de abusar y violar a su hijastra discapacitada cuando era menor de edad.
Helena de la Cruz solicitó una condena ejemplar para Miguel Reynoso. Probó que violó, embarazó y esclavizó a su hijastra discapacitada cuando era menor de edad. La defensa consideró excesiva la pena. La sentencia se conocerá el jueves 20 de abril.
En la tercera y última jornada de presentación de pruebas, una psiquiatra y una psicóloga dejaron claro que existen las secuelas y que la hijastra de Miguel Reynoso, acusado de violarla durante 9 años, no está capacitada para prestar declaración.
En la segunda tanda de testigos declararon los psiquiatras que atendieron a la hijastra discapacitada de Miguel Ubaldo Reynoso, acusado de secuestro y violación. La Justicia citó a la mujer del imputado, madre de la víctima. Todavía no fue localizada.
“Me hicieron muchas preguntas en el juicio. Me sentí bien. A él no lo volví a ver. Y lo que pretendo que no salga más”, dijo Brian, fruto de una relación anterior de Miguel Reynoso, acusado de violar a su hijastra discapacitada, con quien tuvo tres chicos.
Miguel Reynoso, acusado de violar a su hijastra durante 17 años, está detenido desde 2017 y pidió la prisión domiciliaria. En diciembre le pusieron un freno al recurso de su abogado. Ahora, la fiscalía aceptaría. Los familiares de la víctima exigen Justicia.
Acusado del secuestro y violación de su hijastra discapacitada, con quien tuvo tres niños, Miguel Reynoso había solicitado el arresto domiciliario. La tía de la mujer, que hoy tiene 47 años, se opuso. Todavía no hay fecha de juicio para el depredador.
