Nahuel Pennisi: “Se siente algo distinto en las ciudades más chicas”

La zona de la Cuenca del Salado contará con una de las actuaciones más espe­radas. Nahuel Pennisi, can­tante y guitarrista popular argentino, actuará esta noche en el Teatro Italiano de Lo­bos y en el show habrá varios fanáticos de Cañuelas. 

El intérprete, en exclusiva con El Ciudadano, adelantó que pronto se presentará en el distrito y habló sobre todo lo que se viene en su carrera. 

Pennisi es el mismo arriba o abajo del escenario. Surgi­do popularmente en el Festi­val de Cosquín, mantuvo la humildad con el correr de los años y supo engrosar una trayectoria exitosa. Se dio el lujo de cantar junto a los más grandes intérpretes argenti­nos y después hizo su propio camino. Tras ser premiado en el país, fue reconocido en EE.UU. y llegó a estar nomi­nado para los Grammy. 

Su última participación con Abel Pintos recibió elo­gios de todo tipo y su Feat con La Konga (banda de cuarteto), ‘Universo Parale­lo’, ya superó las 8 millones de reproducciones en las pla­taformas digitales. 

–¿Hay una atmósfera es­pecial en las presentaciones en ciudades chicas? 

–Sí, se siente algo distinto y es hermoso porque la gen­te valora mucho más lo que el artista da en el escenario. Ojo, uno se prepara de la misma forma para un teatro chico y un Luna Park, pero se da algo muy íntimo en las raíces de los pueblos. 

–Tu representante es de Cañuelas, ¿vas a visitar la ciudad? 

–¡Seguro! Mi manager me habla todo el tiempo sobre Cañuelas, fui varias veces, pero nunca a cantar. Estuve a punto de presentarme en el Festival de la Virgen Del Carmen, pero por temas de fechas y mi gira no llegamos con los tiempos. Ojalá pueda visitar esa ciudad hermosa, sé que habrá muchos cañue­lenses esta noche en Lobos y les mando un gran abrazo a todos. 

–¿Qué significó el home­naje a la AMIA? 

–Artísticamente, fue algo muy groso, ya que compar­timos escenario con mi ami­go Lito Vitale, Natalie Pérez y Diego Torres. Y después, sentí mucha tristeza por los familiares de las víctimas y es algo que me pega en estas fechas. La música, a veces, sirve para apaciguar el dolor y también, para ponerse a la par en momentos así e invo­lucrarme. 

–Y en tu carrera, ¿qué se viene? 

–Acá estamos, terminando con la gira ‘A solas’, un con­cierto acústico en el que tam­bién repaso varias cancio­nes de ‘Renacer’, el último disco. Estoy grabando una nueva canción que saldrá en agosto y sigo a full con el nuevo material. Y también voy a tener una participación en un musical del Teatro Me­tropolitan. 

–¿Es algo nuevo lo de los espectáculos teatrales? 

–Sí, es una experiencia nueva para mí y es algo que estoy disfrutando mucho. Sinceramente, nunca lo hu­biera imaginado. Desde sep­tiembre, y hasta fin de año, cantaré en la obra ‘Regreso a la Patagonia’, que continúa al popular cuento ‘El Princi­pito’. 

–¿Cómo fue la experien­cia de grabar una canción con Abel Pintos? (NdR: juntos hicieron ‘Mundo’). 

-Sinceramente, fue un re­galo de la música haber com­partido un tema con un gran artista, pero principalmente, mejor persona. Nos conoci­mos en giras y conciertos. Siempre se muestra como es: transparente, honesto y humano. Hay una gran co­nexión. 

–¿Imaginabas el éxito de ‘Universo Paralelo’? 

–La verdad, lo grabamos con los chicos de La Konga, pero no esperábamos tre­menda respuesta. La gente se prendió de entrada y canta la canción con mucho senti­miento ya que todos, alguna vez, han pasado por algo pa­recido. La letra se metió en todos y el ritmo movedizo del cuarteto le dio el toque final. 

–El folclore se adaptó al resto de los géneros y las fusiones, antes hubiese sido algo impensado, ¿no? 

–Sí, seguramente. Antes no se permitían estos cruces. Es que tuvo mucho que ver la pandemia, porque ahora transitamos una nueva era. Los tiempos de la música van más acelerados y por suerte está la chance de en­samblar ideas. 

–¿Cómo pasaste el confi­namiento? 

–Y... para los músicos fue muy difícil, ya que fue un gremio que sufrió mucho. Varios teatros y lugares dedi­cados a la difusión de los ar­tistas tuvieron que cerrar sus puertas. Pero por suerte lo sobrellevamos y es más, re­cién venimos de una gira por la zona de Cuyo y no íbamos hace años porque justo nos agarró la pandemia. 

–¿Cómo vivís el día a día? 

–Muy contento. Volví a instalarme en Buenos Aires, ya que estuve viviendo tres años en Tucumán porque mi señora es de ahí. Así que ahora estamos cerca de todo. Disfrutando de grandes mo­mentos con mis hijos, por suerte los tengo todos los días. Soy muy amiguero y me encanta compartir cosas con mi familia. 

–¿Cuánto tiene que ver tu entorno y tus influencias en la creación de las can­ciones? 

–El entorno es todo. La paternidad fue muy influ­yente a la hora de componer nueva música y renací en un montón de aspectos. Ser pa­dre es algo único, un hijo es un pedacito de uno y lo tomo como algo emocionante. 

–¿Tenés algún sueño por alcanzar? 

– Y... tengo varios, pero el más importante es el que estoy cumpliendo ahora, que es poder ayudar con mi música a la gente que más lo necesita. Disfruto de todo lo que hago, lo que estoy vi­viendo y me encantaría que me recuerden como un ar­tista honesto, sencillo y que se siente feliz arriba de un escenario.