Si bien para inicios de octubre, el trigo venia pasándola pésimo por los efectos de la sequía, al punto de ser una de las peores campañas, las lluvias de estos últimos días le darían al cultivo una porción de esperanza.

Durante la primera quincena del mes, la información daba cuenta de que medio millón de hectáreas de trigo se encontraban a nada de secarse, por lo que muchos productores ganaderos prefirieron que la hacienda a consumiera el cereal para que la pérdida no sea total. El 40% de trigo de la región núcleo se encontraba en malas condiciones y el 80%, en un estado entre “malo y regular”. Las heladas que promediaron el mes tampoco ayudaron.

En el último informe del Panorama Agrícola Semanal de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, dato a conocer unos días antes de las elecciones generales, se consignó que la condición del cultivo de trigo fue de “regular/mala”, producto de la falta de precipitaciones. A nivel nacional, el 35,3% de los cuadros se encuentran transitando entre espigazón y floración, concentrados principalmente sobre ambos núcleos. Y en el Centro-

Este de Entre Ríos, donde se necesitaban futuras lluvias para enfrentar los estadios de mayor demanda, cayó el agua y comenzó a ayudar al cereal aún afectado.

Respecto de las heladas, se informó que se está evaluando el impacto de las mismas sobre el rendimiento, principalmente sobre ambos núcleos y el Centro de Buenos Aires, donde se han relevado daños sobre algunas plantas en puntas de espiga. Sobre el sudeste bonaerense, aún se mantienen los rendimientos potenciales, donde las heladas no generaron un gran impacto.

En tanto, el 53 % de los cuadros aún en pie presentan una condición de cultivo entre “normal y excelente”, mientras que el 46% presenta un nivel hídrico entre “adecuada y óptima”.

Soja

El Gobierno dio por iniciada la siembra de soja en la que proyectan 500.000 hectáreas más que el año pasado. El dato, según la primera estimación de la Secretaría de Agricultura, da cuenta de que se implantarían 16,5 millones de hectáreas en la campaña 2023/24, un 3,1% más, cifra que se irá ajustando a medida que avance la siembra y según varíen las condiciones hídricas.

El informe mensual que la cartera agropecuaria publica el tercer jueves de cada mes, a través de su Dirección de Estimaciones Agrícolas, la soja recuperaría parte de la superficie perdida después de siete años de caída.

Cabe recordar que la última vez que la soja logró semejante crecimiento fue en 2015/16, cuando alcanzó su pico histórico de 20 millones de hectáreas. 

“Ya se encuentran implantados unos pocos lotes de soja de primera en el norte de Córdoba (departamento San Justo) y el noroeste de Buenos Aires (partidos General Pinto y Leandro N. Alem), no habiendo comenzado, como ocurría en otros años, en la zona núcleo por la condición de sequía actual de los suelos”, explicaron desde la Secretaría de Agricultura.

El avance dado a conocer a nivel nacional alcanza al 0,2% de la superficie intencionada; es decir, unas 3.300 hectáreas.

Maíz

El informe de Agricultura reduce 1% la proyección de siembra de maíz, de 10,5 millones que se previeron el mes pasado (misma cifra que la sembrada en la campaña anterior), a 10,4 millones de toneladas.

“La ausencia de lluvias en prácticamente toda la región productiva determina, asimismo, una menor superficie destinada al maíz temprano, la cual se destinará al tardío de mejorar las condiciones climáticas”, comentan en el informe.

Se estima un avance de implantación del 18%, apenas 1% por encima de la campaña pasada, que también fue afectada por la situación de déficit hídrico de los suelos. “La provincia con mayor avance es la de Entre Ríos (74%), que presentaba una mejor condición hídrica semanas atrás, pero que actualmente, ante la falta de lluvias, detuvo las tareas de implantación. Le siguen Santa Fe (30%), Buenos Aires y La Pampa (17%), y Córdoba (15%)”, consigna.