La renuncia del ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, provocó una nueva disparada del dólar blue que impactó de lleno en distintos sectores productivos de Cañuelas.

“Incertidumbre es la palabra que me surge. La economía se desmorona y la inflación está en aumento, pero no por la renuncia del ministro Guzmán, ni por la llegada de (Silvina) Batakis, quien dijo que mantendría el rumbo, sino por ese mismo rumbo, que de no cambiar, profundizará el problema”, dijo el tesorero de Cámara Comercial e Industrial de Cañuelas, Pablo Olveira, en diálogo con El Ciudadano.

“Hoy los comerciantes están en alerta porque no existen listas de precios, no hay entrega de mercadería y la poca que se recibe -continuó el comerciante Olveira- es a remito abierto. Se le suma la falta de importados, debido a la ausencia de dólares oficiales y la terrible inflación que la emisión monetaria indiscriminada genera. Dicha inflación es un impuesto más al asalariado, que corre junto a su sueldo por detrás, afectando todavía su poder adquisitivo”, agregó.

“El panorama es desalentador con pronóstico de agravarse si no se hace algo distinto a lo que se viene haciendo. Caso contrario, seguiremos profundizando más el porrazo que nos daremos con la inminente devaluación”, concluyó Olveira.

En tanto, el dueño de la maderera Guayacán, Héctor Burgariotti, respondió: “Es un momento difícil para todo el país. El sector industrial que usa materiales para la importación y que son necesarios para su fabricación, no los tiene y no puede fabricar”.

Burgariotti, que integra  la Unión Industrial de Cañuelas, comentó: “Vendo productos que tienen insumos importados y se suspendieron las ventas. Productos con melanina no se venden hasta nuevo aviso. Con las maderas nacionales no tenemos inconvenientes, pero desde la semana pasada sufrieron un aumento de un 20 por ciento. Alambre no se consigue y trabajo con lo de Acindar, que suspendió las ventas. Estamos esperando a ver qué pasa. Y, lamentablemente, nos siguen ocurriendo estas cosas como país, además de escuchar cualquier cosa que pueda suceder”.

Desde la Sociedad Rural local, evitaron dar opinión en estos momentos de “reciente designación y sin resultados”, pero deslizaron que “se requiere otra etapa de estabilidad para la Argentina, de bajar la inflación, de mayor crecimiento y conservar la esperanza, con el ministro que sea”.

El productor rural y concejal de Juntos, Santiago Mac Goey, planteó: “El Gobierno perdió el rumbo de la economía. Se encargaron de provocar un desastre, con difícil reconstrucción y debieran ser responsables con los impuestos, la emisión, como con la inflación. Y como integrante de la oposición vamos a bregar porque las instituciones y la gente estén por encima de todo”.

Por su parte, el veterinario y edil del oficialismo Juan Angel Cruz, sobre la figura de la nueva titular en Economía, Batakis, opinó: “Pude compartir la gestión cuando estábamos en Asuntos Agrarios y era ella ministra de Economía bonaerense. Siempre se mostró muy técnica, con solidez y conocimiento político y del territorio. Y además con personalidad”.

Además, aclaró que si hubiese sido otra persona “tendría una reacción más benévola y no iracunda, ya que ella representa otros valores”. Y sobre Guzmán opinó: “Tuvo dificultades sobre el final de su gestión, pero pudo hacer una buena tarea y en el medio de una pandemia”.

Se escuchó desde el mercado del blue local a un operador que “todo esto era previsible. No se puede gastar más de lo que entra. Hay que achicar gastos superfluos y que sienten todos los actores sobre una mesa, sino no se arregla”. El cuevero, además, deslizó: “El dólar sigue estando en el mismo lugar que hace años. El peso argentino es el que vale cada ve menos. Nos comimos más veinte ceros. No sé qué va a pasar”.

Esta semana, el dólar paralelo cerró en nuestro distrito a 285 pesos. “No había precio y no quieren vender, como pasa con los mayoristas que consulto. Y te ofrecían mil dólares, nada más”, aportó otro financista.

Y según le contó también a este medio Víctor ‘Petete’ Caeiro, desde su corralón, “todo sigue aumento entre un 6 y un 7 por ciento en la construcción, como con los sanitarios. Otras cosas aumentaron el 10 o el 15 por ciento. Pero espero y creo que se va a acomodar”. Con su negocio en Brandsen y 9 de Julio, explicó sobre el faltante de productos que “hay algunas cosas y otras que no se consiguen porque dicen que no tienen precio. El hierro está suspendido”. Y según graficó desde ese sector, “algunos se desesperan y quiere comprar ya, antes que siga aumentando”.