La ‘pandemia económica’ impacta en Cañuelas en un 38 por ciento
Un informe del Laboratorio de Desarrollo Sectorial y Territorial de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de La Plata revela que el impacto económico del coronavirus en la Provincia afecta al 48 por ciento de su Producto Bruto, mientras que, discriminado por municipios, la intensidad del problema es en los distritos con mayor densidad poblacional y más inserción del comercio y la industria, y menor en los que están ligados a la actividad agrícola-ganadera.
Según este análisis universitario ante el nuevo escenario planteado por el coronavirus, las necesarias decisiones de distanciamiento y aislamiento han generado un impacto heterogéneo entre las diversas ramas de actividad económica: por un lado, aquellas consideradas esenciales, como la cadena agroalimentaria, comercio de alimentos y salud, que siguieron trabajando en forma relativamente normal mientras que el resto, salvo contadas excepciones tuvieron –y aún tienen– fuertes restricciones para funcionar de la misma manera.
El estudio revela que en Cañuelas el golpe del virus mencionado impactó en un promedio del 38 por ciento en su actividad económica, mientras que en Lobos es del 39 por ciento.
En tanto, en los otros distritos de la región, el impacto será, según el Laboratorio de Económicas, del 38 por ciento en Marcos Paz, Monte 40 por ciento y Roque Pérez con el 32 por ciento.
Nuestro distrito figura en la zona media; y en la otra punta de la tabla los más golpeados son La Matanza con un 51 por ciento y Ezeiza con el 52 por ciento.
Tres grupos
El informe define tres grupos de actividades según como han evidenciado los efectos económicos del aislamiento. Uno con impacto negativo bajo, otro medio y finalmente un grupo de actividades que ha sufrido un impacto alto.
En el primer grupo se ubican las actividades agropecuarias e industrias esenciales, que no han sufrido un impacto significativo en su funcionamiento. Asimismo, otras ramas de actividad que tendrán bajo impacto son aquellas que se representan por salarios pagados, como lo es la administración pública y la educación. También con menor impacto, la elaboración de medicamentos y material médico, generación y distribución de energía, la venta de alimentos y los servicios de telecomunicaciones.
Dentro del grupo medianamente negativo, se ubican las actividades relativas a la intermediación de financiera, seguros y comunicaciones; los servicios de salud.
Las actividades con un fuerte impacto negativo se ubican los hoteles, restaurantes, industria manufacturera, construcción, comercios mayorista y minorista, transporte y los servicios en general.
Los estudiosos de Económicas usaron la siguiente metodología: Producto Bruto Geográfico de cada municipio, peso de la cadena agroalimentaria y consumo de alimentos. A esa estructura le aplicaron los impactos sectoriales. Así llegaron a una medida que señala el porcentaje de Producto Bruto que se perderá por las restricciones sanitarias, teniendo en cuenta un mes completo de aislamiento.
La Provincia tendrá afectado el 48 por ciento de su producto, explicado por la industria manufacturera no esencial, que aporta el 40 por ciento de la caída, el comercio no esencial, que agrega otro 17 por ciento, y la construcción con un 9 por ciento.