Desde el paraje El Taladro solicitan que algunas de las puestas en marcha que se llevan a esa zona para mejorar las calles y los desagües de las aguas “se terminen de una vez. Empiezan y después desaparecen”.
El vecino Marcelo Serrano, quien hace unos años tiene su casa permanente en el lugar mencionado, insta a las autoridades de la comuna para que “terminen las obras”.
Según dijo a este medio, el pedido consiste en “coordinar con un profesional de hidrología, un ingeniero, con un relevamiento de toda la zona. Que identifique los puntos donde tenemos problemas con el agua que no termina de irse y avanzar con otras medidas”.
“Hará unos dos meses empezaron por el ingreso y luego por el fondo de las calles. Pero dejaron todo y se fueron. Entonces hay inconclusos algunos cruces sin entubar y otras calles sin terminar. Además, quedaron algunos vecinos con los tubos esperando hacer el trabajo, como les prometieron colocarlos, pero no siguieron trabajando en El Taladro”, indicó Serrano.
Durante el contacto con este medio, agregó: “El vecino compró los tubos, ellos lo colocaban, pero primero desaparecieron las máquinas y esto quedó inconcluso”.

Mariosa es una de las arterias inconclusas, en tanto que en Cisneros “jamás trabajaron”. 
Sobre lo que ocurre cuando llueve comentó que “si no hacés un cruce de calles con un entubado, el agua después no tiene dónde ir. Entonces se rebalsa la zanja y luego la calle”. Luego agregó que “el agua antes tardaba como dos días, pero en la actualidad en unas horas ya bajó. El trabajo hizo sus mejoras, pero faltan más trabajos, como lomos de burro”. 
Por otra parte, comentó que algunos vecinos, tal vez por falta de información, “se niegan ante la instalación de romper la vereda de su vivienda y colocar un tubo. No se dan cuenta que es una mejora para terminar de inundarse y circular de otra manera”. Asimismo, comentó que “hubo también quienes después de los trabajos del municipio taparon la zanja”.
En paralelo, destacó la presencia de un móvil odontológico que atendió a chicos del barrio. “Estuvo la señorita Araceli Serrano, quien empieza en la política y se le alcanzó –dijo el habitante– una nota con los pedidos de los vecinos. De esa, Araceli prometió la atención odontológica. Finalmente se atendió a chicos y chicas del Taladro menores de 10 años. Tuvo un excelente recibimiento de los vecinos, ya que es la primera vez que son atendidos en el Taladro, Araceli se puso a disposición para regresar nuevamente en un corto período para poder atender gente adulta”.

Leandro Barni – leandrob@elciudadano.com.ar