Mercedes Benz comenzó a testear a sus trabajadores

Salud - COVID-19 27 de junio de 2020 Por El Ciudadano
La empresa automotriz ubicada en La Matanza, donde trabajan muchos vecinos de Cañuelas, decidió comenzar a testear a sus empleados mayores de 50 años o que vivan en zonas de alta circulación vital. Según fuentes oficiales, esto lo realizan “con el objetivo de poder avanzar con la detección de casos asintomáticos frente al avance de la pandemia del coronavirus”. El Ciudadano pudo conversar con el titular del gremio de SMATA, Ricardo Pignanelli, sobre las medidas que están tomando las automotrices para poder producir en medio de la pandemia y sobre el predio que puso a disposición de Cañuelas por el COVID-19.
Pignanelli Smata WEB
Ricardo Pignanelli, titular del gremio de SMATA.

–Rodo Herrera: Mercedes Benz co­menzó a testear a sus empleados mayo­res de 50 años o que residen en zonas vulnerables, ¿cómo están el resto de las automotrices? 

–Ricardo Pignanelli: En Volkswagen hicimos hisopar a 670 personas, cinco casos salieron positivos, en Ford a 486, dos casos positivos, Toyota 2.400 perso­nas, 11 positivos, en Fiat a 778 personas, 20 positivos, la que mayor tuvimos. En Mercedes Benz empezamos este martes, tenemos un solo caso positivo. También en nuestro sanatorio de 533 testeos, 56 fueron positivos, eso en gente que tiene síntomas. Estamos en 1.1 por ciento de casos positivos. 

–RH: ¿Cómo coordinaron con las fábricas? 

–RP: Primero hicimos los protoco­los, arrancamos en marzo planificando en cómo hacerlos, después hicimos un acuerdo del 50 por ciento lo pagamos no­sotros, el otro 50 por ciento lo pagan las compañias. Arrancamos diciendo quere­mos laburar con la gente haciendo los hi­sopados. Ya llevamos un 5.000 en total, y el 1 por ciento de ahí dio positivo. 

–RH: Tengo entendido que las fábri­cas coordinaron transporte de los ope­rarios. 

–RP: Eso fue parte del protocolo, com­binamos el transporte con las medidas que se marcan, es privado, en sesenta de capacidad viajan 30 y después también con trabajadores que van en sus coches, más de dos personas no pueden ir. Pusi­mos las cámaras de temperatura, y todas las medidas de seguridad que marcaron los protocolos de salud. Le agregamos el hisopado porque esto nos permite preve­nir, donde encontramos a uno, hacemos un arco con un compás y al otro día hiso­pamos al resto. Si encontramos uno con COVID, la mayoría fueron sintomáticos, pero igual aislamos al resto que estaban cerca y dejamos pasar entre 3 y 5 días y les hicimos el hisopado al resto, si daba negativo volvían a laburar y si no se quedaban en cuarentena. Te digo más, los japoneses no saben cómo, por ejem­plo, en Toyota fabricamos 5.600 unida­des, de lo cual el 20% se vendieron en Argentina, el 50% a Brasil y el otro 30 a otros países. 

–RH: ¿Aumentaron los turnos? 

–RP: No, lo que hicimos fue laburar en un solo turno porque no te olvides que toda la gente que tenía problemas crónicos quedó en su casa, y no es mu­cha pero es, en la mayoría tenemos un turno y después viene el otro. 

–RH:¿SMATA puso a disposición de los vecinos de Cañuelas un predio en caso de que sea necesario? 

–RP: Claro, nuestro predio forma par­te de la comunidad de Cañuelas, así que rápidamente cuando esto comenzó nos pusimos a disposición de la intendenta Fassi, que es quien está manejando, creo de manera impecable, la crisis por este tema sanitario. Tenemos 90 hectáreas todas parquizadas y además tenemos un hotel con 400 camas que pusimos a dis­posición de la provincia, ahora estamos habilitando 20 piezas que van a estar listas para la semana que viene, se las cedemos a los que tienen que hacer la cuarentena. Van allá donde trabaja la gente de limpieza con los protocolos, hay dos enfermeras y un médico y con eso cubrimos, en vez de llevarlos a un hotel en el centro lo llevamos al predio recreativo que, si bien no van a poder salir, es otro aire. Y para hacer la cua­rentena es muy óptimo. 

–RH: ¿Cómo te cuidas vos? 

–RP: Yo tengo 67 años, me estoy cuidando, salgo de mi casa hasta el gremio, vivo en Palomar. Al volver me espera mi señora, me rocía con agua y alcohol, yo siempre con el encendedor lejos (risas). Con mucho cuidado por­que además tengo a mi mamá con 93 años, la joya de la familia.