Una desgracia con suerte volvió a conectarla con lo que más le gusta hacer. El miércoles 7 de junio, un incendio la puso al borde de la muerte junto a su pareja, pero Martina Cuarenta salió adelante y recibió el apoyo de todo Cañuelas. Y de sus ex compañeras de cancha, claro.

“Me acuerdo del momento y la verdad que no se lo deseo a nadie. No me gustaría pasar otra vez por eso, fue algo muy feo. Se dio todo muy rápido y de los pocos recuerdos que tengo son ya en el hospital. Gracias a Dios y a la Virgen nos mantuvimos siempre juntos con mi novio”, le contó Martina a El Ciudadano.

La chica agregó que “la rehabilitación fue bastante rápida, nos tocaron unos médicos y enfermeros bárbaros durante toda la internación”. Y en el repaso de sus últimos días, se emociona: “Me enteré que muchas personas estuvieron orando por nosotros, estoy muy agradecida, en especial a la gente del club Cañuelas, ojalá pueda volver en un futuro”.

Durante su internación en el Hospital Cuenca, toda la comunidad, y en especial las chicas del fútbol femenino, acompañaron a ‘Boyita’ en el día a día.
Martina se inició en el club antes que el ‘Tambero’ ingresara a la AFA, en el proceso de formación del equipo de 7 a 11. Inicialmente, jugó como delantera y cuando se pasó a cancha grande ocupó distintas posiciones.

En la primera etapa actuó como lateral por derecha y volante, luego fue atacante. Se caracterizó por su temperamento, su despliegue cuando arrancaba desde atrás y su excelente remate de pierna derecha, lo que la llevó a anotar varios goles olímpicos y de tiro libre. Llegó a marcarle dos tantos a Newell’s y en ese momento, la coordinadora de ‘La Lepra’ preguntó por ella.

Soñó con vivir del fútbol y ser profesional, pero dada su realidad económica, se dedicó a trabajar y pasó a formar parte de equipos barriales, ya que por sus ocupaciones laborales no podía entrenarse. Ahí, en el fútbol sala, se destacó en toda la región y en varias localidades vecinas. De hecho, durante la semana en la que se produjo el incendio se encontraba practicando en San Miguel del Monte y también es parte de otros equipos del distrito y Las Heras.

“Durante el tiempo que la acompañé en el hospital, vi desfilar a muchas jugadoras de la región, además de las chicas del equipo de Cañuelas. Martina es muy querida, ya tras alejarse de la institución recorrió varios clubes de barrio y se destacó en todos. Tanto es así que en Monte le hicieron una bandera, la tienen como una Messi del baby fútbol”, contó Patricia Ramírez, una de las coordinadoras del ‘Tambero’ en la etapa de Cuarenta como futbolista.

“Es una jugadora que va al frente y hace goles. Es una lástima que se haya ido del club, hacíamos una gran dupla, tenía un potencial tremendo. Además, era muy jodona y siempre andaba de buen humor durante la etapa que compartimos allí”, agregó su tocaya, Martina Iraola, quien en la actualidad juega en Boca y en la Selección Argentina. Ambas recorrieron el mismo camino al principio.

“Se estaba por recibir de barbera y estaba trabajando con eso, pero no le quedaba tiempo. Es muy difícil seguir adelante, ya que en los equipos de fútbol de chicas no les pagan, entonces se hace cuesta arriba. En el caso de mi hija, tuvo que dejar hace un año porque además de cortar el pelo también trabajó de niñera y hasta fue moza. Abandonó la pelota y ya después trabajaba de todo lo que saliera”, contó su mamá Raquel.