La Sociedad Italiana anunció esta semana la esperada fecha de reapertura de la sala del Cine Teatro Cañuelas, uno de los espacios culturales más destacados del distrito, a punto de concluirse los trabajos de puesta en valor del edificio.

Será el mes que viene, con un espectáculo a cargo del bailarín Hernán Piquín y sus danzarines, que ofrecerán una función en la noche del sábado 27 de mayo.

Con una capacidad para 900 espectadores y un escenario de 12 metros de boca por 8 metros de profundidad, la sala se encontraba cerrada desde hace diez años. Entonces, se clausuró para realizar obras de mantenimiento y refacción, las cuales se hicieron en muy contadas ocasiones y de forma parcial.

Los trabajos, que en un principio se habían pautados en etapas, quedaban inconclusos y el teatro permanecía cerrado sin que se pudiera realizar ningún tipo de actividad cultural. Una situación lamentable, en definitiva, para la comunidad y la escasa masa societaria de la Sociedad Italiana.

Distintas comisiones directivas no pudieron llevar a cabo un plan de refacción total del teatro, hasta que el año pasado lograron dar con un ‘benefactor’ y establecer una funcionalidad integral. El lugar presentaba problemas de climatización, filtraciones e inundaciones, falta de calefacción, vandalización, iluminación deficiente, camarines inutilizables y desprendimientos de cielorrasos.

Pablo Daniel Guzzetti, al frente de la empresa Platea Uno, dedicó millones de pesos en reacondicionar el espacio, realizando tareas de refacción y trabajos de electricidad y pintura. A cambio de esta inversión, se le concedió una cesión de uso para explotar de manera comercial, durante el lapso cinco años, el escenario de la calle Lara 824, entre Del Carmen y 25 de Mayo. En ese periodo, la institución de la colectividad italiana recibirá el equivalente a 25 entradas por show, con la excepción del primer año, que percibirá 12 tickets.

Además, se puso en funcionamiento el sistema de telones, se cambiaron los baños para el público y mejoró la seguridad en caso de que haya emergencias.

Llevan unos cinco meses de tareas, a cargo de ‘Manos a la Obra’, la cooperativa de trabajo de Monte, que ya tiene algo más del 80 por ciento de la obra concluida.

Durante los últimos años, el teatro tuvo alguna recuperación con aportes de fondos de la Municipalidad de Cañuelas, bajo las administraciones de Gustavo Arrieta y Marisa Fassi, pero nunca se pudo comenzar a utilizar como sede de espectáculos, eventos, encuentros y exposiciones.

“Todo esto es una emoción enorme. Creo que todos los cañuelenses queremos que funcione porque es un sentimiento. Se devuelve a la comunidad un teatro que es para la cultura y que nos identifica a todos. ¿Quién de chico no fue al cine y al teatro? No debe haber persona en Cañuelas que no tenga el amor que le tenemos todos por el Cine Teatro”, declaró el presidente de la Sociedad Italiana, Alberto Della Corte, en diálogo con El Ciudadano.

Un poco de historia

La sala del Cine Teatro de la calle Lara fue inaugurada en 1938. Allí se desarrollaron funciones de cine, espectáculos de coreográficos de ballet, conciertos sinfónicos y teatro. Además, hubo actos escolares y gubernamentales.

Es la única sala antigua e importante de Cañuelas, con una geometría y proporción armónica. Cuenta con platea, palcos y galería.

La reutilización del Cine permitirá el regreso de una temporada artística con un ciclo de conciertos, danzas, teatro. Y para ello se resolvió que las actividades se compartirán entre la Sociedad, que tendrá a su disposición el lugar de lunes a miércoles.  El resto de la semana lo explotará la empresa Platea Uno.

El empresario

Guzzeti, de 74 años, vive en San Miguel del Monte, es el titular de Platea Uno, empresario y productor teatral. Está a cargo del Teatro Coliseo, en Lomas de Zamora. Hace más de cinco décadas que está en el negocio del espectáculo. Fue representante de artistas y productor de programas radiales en los ‘70. Además, hace producciones artísticas en distintos puntos del país.

“A Cañuelas voy a llevar el primer nivel de espectáculos como el que tengo con el Teatro Coliseo, donde hacemos entre 90 y 100 funciones de gira por año. Con mi productora había traído obras a Cañuelas, como fue Art, con Ricardo Darín o Panam, con la que agotamos las entradas. Luego, la Sociedad Italiana empezó a tener otras actividades con la Municipalidad y era complicado encontrar fechas, hasta que se cerró la sala. En la zona hay una linda sala en Lobos, pero con poca capacidad para eventos grandes. Empecé a volver a hablar con la Sociedad y ellos con la Municipalidad hasta que escucharon mi propuesta. Y el 2 de diciembre arrancamos a restaurar la sala de Cañuelas, donde falta muy poco para abrir. Se está terminando el frente, trabajando en el foyer. La boletería está casi terminada, mi oficina también, para luego seguir colocando las butacas”, relató el empresario ante El Ciudadano.

Sobre sus alcances y propuestas para el espectador cañuelense, Guzzeti puntualizó: “Considero el primer nivel a una sala para todos los gustos y con una puesta digna y de buen show, bien presentada. Puede haber desde youtuber hasta ballet clásico, bailanta o tango, Rata Blanca o David Lebón. Quiero un teatro de gira de primer nivel y para eso trabajamos en todos los detalles, desde la comodidad del espectador en la sala hasta la programación del espectáculo”.

Por otro lado, comentó que la reinauguración “ser partícipe de una reapertura de una sala lo tiene muy entusiasmado a Piquín. Para el 22 de mayo está terminando una gira por la Patagonia y, si Dios quiere, el 27 estará en Cañuelas”.