El Ojo Clínico de Saporiti: La Selección pasó otra prueba psicológica
Me sumo a la alegría por este nuevo pase a semifinales. Argentina está entre los cuatro mejores del mundo y el logro es más que merecido, por la tarea de Lionel Scaloni, el cuerpo técnico y sus jugadores, fundamentalmente.
El equipo jugó dos partidos en uno. El cuerpo técnico planteó un choque muy inteligente desde el comienzo y los jugadores llevaron a cabo esa idea con la posesión de la pelota. Pero después, no pudo mantener ese nivel y ahí perdió el balón. No pudimos repetir en el segundo tiempo porque pedimos la pelota y en este deporte se juega con una sola; si la perdés, la pasás mal.
Hasta el momento, el equipo ya pasó dos pruebas psicológicas fundamentales, algo que no cualquier equipo lo consigue. El primer golpe fue contra Arabia, en la primera caída por la fase de grupos. Y ayer, contra Países Bajos, volvió a sentir un cachetazo en el empate en los 90 minutos. Hablo como jugador y técnico, en ese momento se siente algo muy feo, ya que uno se prepara para festejar y de repente, se va del partido.
Para colmo, ellos pusieron grandotes y el asunto se complicó por arriba. Hay que admitir que el tiro libre fue una jugada ensayada, todos esperábamos el remate al arco y terminó con un pase entre líneas que terminó en gol.
El equipo tenía un extraterrestre y todo sabemos de quién hablo, de Lionel Messi. Pero ahora se le sumó otro jugador de otra galaxia: Emiliano Martínez. El ‘Dibu’ demostró que tiene mucha personalidad y tiene unas cualidades técnicas enormes. Respecto a los elogios del arquero, se lo pone entre los mejores de la historia del fútbol argentino y creo que tiene armas para figurar ahí. En mis 83 años vi fútbol de todo tipo y creo que el ‘Pato’
Fillol es uno de los más destacados. Martínez tiene un camino muy grande por recorrer, está demostrando una jerarquía y seguridad muy grande y es de gran apoyo para los compañeros, algo fundamental. César Luis Menotti decía que sin un buen arquero, no hubiese podido ser campeón en el ‘78.
Ojo, ahora el martes se va a encontrar con un grandísimo rival, que es Croacia. Hay que tener recaudos y estar atentos. No tengo dudas de que el cuerpo técnico va elegir a los que mejor estén para salir con todo para clasificar a una nueva final.