La Escuela de Formación Policial descentralizada de Cañuelas ya empezó su ciclo lectivo en las afueras del casco urbano, del cual egresarán hombres y mujeres como efectivos que, antes de fin de año, reforzarán la seguridad en las calles del distrito. Al mismo tiempo, hay una oferta laboral para encontrar conductores de patrulleros.

La búsqueda está destinada a cualquier persona que desee ingresar a la Policía, pero sus funciones se limitarán a conducir los móviles. Los aspirantes ya reciben formación teórico-práctica, egresando en 2022 luego de cumplir con clases y ejercicios específicos, tal como ocurre con las otras escuelas descentralizadas de la histórica Juan Vucetich.

Para ser policía se cursa durante nueve meses (un mes internado en la Vucetich y un mes en la escuela de esta localidad).

Las clases para esta suerte de ‘remiseros de policías’ comenzaron el mes pasado en su nueva sede. Sobre la convocatoria en la Municipalidad tratan de no calificar, pero afirman que se presentaron “muchos vecinos”, sobre todo de los alrededores de la ciudad y hasta de distritos vecinos. Todavía sigue abierta la convocatoria.

Los interesados deben hacer las evaluaciones y pruebas físicas y de salud mental para comprobar quiénes son aptos para ejercer la función policial.

Y para convertirse en nuevos miembros de la fuerza bonaerense, manejando los patrulleros, cobrarán como policías, pero sin portar armar ni insignias, solo abocados a tener las manos en el volante.

La convocatoria ya se lanzó en Moreno, Vicente López, Berisso, Quilmes, San Isidro, Brandsen, Ensenada, La Matanza, Ituzaingó, San Miguel, Tres de Febrero, Hurlingham, Almirante Brown, entre otros distritos.

Los requisitos

No contar con antecedentes penales y tener aptitudes físicas para la función, además del colegio secundario concluido. Luego, deben hacer un curso durante dos meses y una semana. Las clases arrancan a las 8 y hasta las 13, para unas horas después, retomar el aprendizaje de 14 a 17. Por la mañana se enseña la teoría y por la tarde, la práctica. Los requisitos son pocos y parecen accesibles. Sin embargo, para esta búsqueda solo hay un total de 17 alumnos, según datos obtenidos por El Ciudadano. En principio eran 26 aspirantes.

La propuesta del ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires y el municipio consiste en formar a vecinos de cada partido para que luego trabajen en su distrito de origen. “Es ideal que los nuevos efectivos sean de la zona porque tienen su vínculo de pertenencia y conocimiento del lugar. Pero puede acercarse gente de otros distritos”, destacó el jefe de Gabinete de la Comuna, Fernando Jantus.

El funcionario adelantó: “La mayoría son de Cañuelas y la campaña sigue en el municipio para que los egresados sean de acá. Hay inscriptos e interesados, pero tienen que pasar las pruebas”.

Se pueden inscribir en mseg.gba.gov.ar o en los puntos callejeros que se montan para esta ocasión en Libertad y Del Carmen; en la plaza Mártires de Malvinas, en Máximo Paz y en Santa Rosa, también en la plaza.

“Se pide que personas de determinada edad y con registro puedan formar parte de la Policía, que se sumen para ser civiles que manejen móviles policiales identificables. Es un elemento más de la seguridad y desde el municipio se brindan los recursos para eso, con personal e infraestructura, a partir de una iniciativa del Ministerio de Seguridad. Tendrán un rol operativo, no para intervenir en un delito”, explicó Jantus.

Los patrulleros hoy son manejados por policías. Dentro de poco lo harán auxiliares locales.

Frente a la inseguridad y la falta de recursos humanos, el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, pergeñó una convocatoria inédita. Pero también responde a cuidar las unidades vehiculares, cada vez más sofisticadas y costosas (alrededor de 10 millones de pesos el patrullero). Que en ocasiones terminan dañados y no precisamente frente a una persecución de gente sospechosa. Por eso contratan civiles para conducir los móviles de la Bonaerense.

La formación dura dos meses y los aspirantes (de entre 18 y 29 años) se recibirán de Auxiliar de Policía y no abordarán los delitos desde una unidad operativa. Tendrán un escalafón diferente al del agente de seguridad.

El rubro será Servicios Generales, aunque no dejará de ser policía. Con un salario de alrededor 60 mil pesos.

Sobre algunas de las características del curso para conducir, los instructores policiales creen que es suficiente el tiempo para llevar adelante rodados pesados y blindados, además de usarlo como escudo ante un enfrentamiento armado.

Por estos días, además, se está buscando llevar las prácticas de manejo en otro predio, ya que el lugar actual no tiene, según dijo un oficial consultado por este medio, “una pista grande. Hay un cordón de un lado y una zanja del otro, que frente a determinadas maniobras, el aspirante puede impactar contra esos lugares y romper el móvil o hasta herirse. Por eso se estaría viendo el Mercado Agroganadero, donde hay asfalto, sin postes, ni alambrado, que no obstaculice al cursante y su vehículo. Los alumnos van bien, pero necesitan otros ejercicios para avanzar y para ello el lugar se debe ampliar”.

Al mismo tiempo que están manejando ya recibieron clases de Derecho, Educación Física, Bioseguridad, Marco legal y Derechos Humanos, Manejo y Conducción  Mantenimiento de Móviles.

Con un solo policía en el móvil y con otra persona que solo está capacitada y autorizada para conducir, Jantus justificó la capacidad operativa frente a un consulta de El Ciudadano. Y dijo que no se presentaba alguna debilidad ese momento. A su entender esto no empeora ni disminuye la presencia policial en las calles: “Hoy son dos policías en un patrullero, pero hay menos agentes en la calle. Con esta decisión habrá más policías para cuidar a nuestros vecinos. Y en muchos países, los policías andan solos en los móviles”.

Los choferes irán desarmados y pueden quedar en medio de una balacera. Esto implica nuevos interrogantes, claro. 

Mientras tanto, la parte teórica y psicotécnica se desarrolla en aulas construidas en la Ruta 205 y República Oriental del Uruguay. Debajo de un tinglado se hicieron dos aulas, un SUM, sanitarios y vestuarios, además de un espacio para actividad física. La cursada es de lunes a viernes.