La plaza San Martín es el epicentro de la Gran Fiesta Criolla de la Provincia de Buenos Aires. Y para celebrar el Bicentenario de Cañuelas, la Federación de Centros Tradicionalistas organizó una serie de eventos con increíbles propuestas. El lunes comenzó una semana en la que la tradición de nuestro pueblo gaucho pone en valor su importancia.

La apertura estuvo a cargo del Taller de Folclore de Uribe, perteneciente al Instituto Cultural, dirigido por el profesor Pili Espina, que expuso un cuadro de Molina Campos. El cierre de la primera noche tuvo sobre el escenario al talentoso intérprete Claudio Agrelo. Mano a mano con El Ciudadano, el presidente de la Federación, Darío González contó cómo vive un gaucho en estos tiempos modernos.

–¿Cómo fue la organización para programar un encuentro tradicionalista tan imponente en Cañuelas?
–La primera vez que vinimos a Cañuelas recuerdo que estaba Gustavo Arrieta como intendente. Trajimos un espectáculo grande: más de mil jinetes desfilaron por las calles céntricas del pueblo. Veinticinco mil personas pasaron, participaron y disfrutaron de aquella inolvidable fiesta en la Estancia La María Cristina.

Gustavo, en aquella oportunidad, nos dijo: “Muchachos, acuérdense que Cañuelas en cinco años festeja su Bicentenario y tenemos que armar algo grande para la gente”. Que hayan confiado en la Federación para tan importante festejo nos llena de orgullo. Desde ya que estamos agradecidos con la Jefa Distrital, Marisa Fassi, y al sub secretario de Cultura, Esteban Sarlenga, que nos brindan todo el apoyo y no nos dejan faltar nada. Cañuelas nos hace sentir como en nuestra casa, nos acompaña en todo. Esa confianza hacia nosotros hace que pongamos más empeño en nuestra labor para que la fiesta salga bien. 

González agrega: “Por esta razón, tras la impronta de hacer algo grande, comenzamos a trabajar con todos los intendentes de la región para que faciliten el traslado y la participación de la gente de los distritos vecinos. El pueblo de Navarro nos envió su carreta histórica, la cual está expuesta en la plaza frente a la Iglesia; El Lazo de San Isidro con la carreta y la virgen; San Vicente y Marcos Paz trajeron sus carruajes; el Centro Tradicionalista de Coronel Brandsen colaboró con la Casilla de campaña que también está expuesta en la Plaza San Martín, y hay mucho más para ver. Esta unión de distritos hace a la fiesta más importante y permite que la gente disfrute de esta semana, de este Tiempo de Gauchos”.

–Estamos en un mundo que está en constante desarrollo tecnológico y cambios sociales. Las redes de comunicación y las organizaciones feministas marcan una nueva agenda. ¿Cómo viven estos cambios desde una cosmovisión tradicionalista?
–Nos llevamos bien, ser tradicionalista no es vivir como en el siglo XIX, nos fuimos adaptando siempre a los cambios tecnológicos, no podemos prescindir o renegar de ellos. Hoy por hoy, gran parte de la organización y la publicidad del evento fue llevado a cabo con la ayuda de la conexión a internet y las redes sociales. En tiempos de pandemia nunca perdimos el contacto entre los Centros Tradicionalistas, las reuniones por zoom o los mensajes de texto y la videollamada nos mantuvieron en contacto. Por eso te digo, no renegamos de los avances, sino que los sumamos a nuestra labor sin perder nuestra esencia. De todas maneras, seguimos con la folletería y los carteles en las paredes. El candil, el telegrama o el telégrafo son parte de nuestra historia y nosotros los reivindicamos para saber de dónde venimos, pero no los usamos más, están en exposición. Con respecto a los movimientos sociales y a los derechos que las mujeres han ido ganando en estos últimos tiempos son bienvenidos. El martes, que fue el Día Internacional de la Mujer, la programación de nuestro encuentro estuvo dedicado a las mujeres y dirigido por mujeres. Sobre el escenario estuvieron destacadas cantantes brindando su magia y su color a la noche. Lucía Ceresani, Mónica Younis, Analía Aguirre y Mica Córdoba fueron protagonistas reivindicando y haciendo uso del espacio que se merecen.

–¿Qué mensaje le darías a los jóvenes de hoy que se van acercando a las Fiestas Tradicionalistas o a las Peñas folclóricas?
–El mensaje que les doy es que se arrimen al folclore, que empiecen a frecuentar las peñas, a bailar y a cantar nuestra música. Eso va a ayudar a que no perdamos nuestra identidad. No estoy en contra de las culturas que vienen de afuera, pero estoy a favor de defender la nuestra. Si no defendemos nuestra cultura, en las grandes ciudades que están alejadas del campo se hubiera perdido nuestra esencia. Yo vivo en Quilmes, una ciudad que ya no es más rural; sin embargo, cultivamos el tradicionalismo y lo mantenemos vivo. Coqueteamos con los jóvenes para atraerlos y ahí, el uso de las redes sociales, como hablamos recién, es de suma importancia porque es el canal donde nos encontramos con ellos. La juventud se va arrimando y es bienvenida.