“No haber podido jugar en Europa es una cuenta pendiente”

Deportes 04 de julio de 2020 Por El Ciudadano
Carlos Chiappe WEB
Chiappe con la casaca de Deportivo Cali (Colombia), donde jugó del ’80 al ’82.

Carlos Alberto Chiappe es el protagonista de esta semana en esta serie de entrevistas en la que exactamente el mismo cuestionario le es acercado a diferentes deportistas locales de todas las épocas.

Mediante este cuestionario, se abordó al ex futbolista no sólo desde el lado deportivo sino y principalmente desde lo personal e íntimo si se quiere.

 –¿Qué le dio el fútbol?

–La posibilidad de viajar al exterior, de conocer gente que se portó muy bien conmigo e incluso de conocer otras culturas. También me dio la posibilidad de jugar al lado de verdaderos monstruos como Willintog Ortiz, ‘Cococho’ Alvarez, Pedro Zape, Diego Umaña, Sergio ‘Checho’ Angulo y Fernando ‘Pecoso’ Castro en Colombia, como así también Richard Páez y ‘Juanjo’ Scarpeccio en Venezuela. Ni hablar de Hugo Tocalli, el ‘Bulldog’ López, el ‘Indio’ Gómez y Rodolfo Fucceneco en el Quilmes del ’75 o Adolfino Cañete en Paraguay. Todos me dejaron muchas cosas lindas y estoy orgulloso de haber podido estar en esos grupos.

 –¿Qué le sacó el fútbol?

–Básicamente tiempo. Por ejemplo no he podido levantarme una mañana, desayunar con mis hijos y llevarlos a pasear, incluso a veces solo los veía un ratito a la noche antes de que se acostaran. También me sacó la posibilidad de estar más en mi casa con mi familia pero no sólo con mis hijos, sino con mi familia en general. Me perdí acontecimientos familiares como el casamiento de mi hermano Aníbal, cumpleaños de mis padres y hermanos. No tuve la oportunidad de despedirme de mi abuelo cuando falleció... Pero todas estas cosas no dejan de estar relacionadas en sí con el tiempo que el fútbol me sacó. Naturalmente también me sacó tiempo para estar con amigos sobre todo en la juventud.

–¿Qué perdió por el fútbol?

–No perdí nada aunque podría mencionar el hecho de no haber estudiado, de no haber seguido una carrera como Maestro Mayor de Obra o Técnico Mecánico. O sea perdí la oportunidad de estudiar pero no sé si eso es suficiente como para decir que perdí algo por el fútbol dado que disfruté de todo lo que hice. Disfruté entrando a una cancha, disfruté estar en un vestuario y disfruté vivir en otros países. Hice lo que me gustaba y encima me pagaron, ¿qué más?

–¿Qué ganó por el deporte?

–Gané mucho, como por ejemplo el hecho de poder tener una casa.

–Si pudiera volver el tiempo atrás, ¿tomaría alguna decisión diferente a las tomadas respecto a su carrera deportiva?

–Sí. En 1979 estaba jugando en Paraguay cuando vinieron a verme del Málaga español, me vieron jugar un partido y quedó todo muy avanzado. Un miércoles arreglé todos los papeles por lo que tras jugar el fin de semana, el lunes partía rumbo a España para firmar el contrato. Pero el viernes previo me quebré la clavícula, estuve un mes enyesado y consecuentemente se esfumó la posibilidad de jugar en Europa. ¿Cambiaría algo? Naturalmente si pudiera volver el tiempo atrás no iría a entrenar ese viernes.

–¿Está conforme con su carrera deportiva?

–Muy conforme. Tuve la suerte de ser campeón con Quilmes en 1975, con Platense en el ‘76, con Estudiantes de Mérida (Venezuela) en 1978 y con el Deportivo Cali (Colombia) en el ‘81. Jugué tres veces la Copa Libertadores llegando en una ocasión a semifinales con el Deportivo Cali. En el ‘84 me alejé del fútbol profesional y pasé a jugar en Athletic de Lobos ganando seis títulos en la Liga Lobense y un Torneo Provincial de Campeones de Buenos Aires en el ’92. También jugué en Veteranos de AFA para San Miguel de Las Heras siendo subcampeón y fui convocado a la Selección de Veteranos jugando ocho partidos en varias ciudades del país. Otro logro fue haber podido jugar, ya con sesenta años, junto a mi hijo ‘Nacho’. Jugar con él y salir campeones fue algo increíble, soñado.

–¿Alguna cuenta pendiente?

–No haber podido jugar en Europa, a causa de aquella lesión, es una cuenta pendiente. Pero pude viajar a Europa mediante otro deporte o juego. De hecho junto a ‘Carita’ Yusti viajamos a San Sebastián donde fuimos subcampeones del mundo de muss.

–¿Lo han defraudado en el ambiente deportivo?

–No, siempre me cumplieron con lo que se habló, mis compañeros fueron y son hermanos del fútbol. Aunque quizás sí me ha defraudado gente de la ciudad, de aquí, gente conectada al fútbol.

–¿Lo han sorprendido para bien?

–Sí. En Paraguay y al día siguiente de aquella lesión, a las ocho de la mañana y en la puerta de mi casa había unas ochenta personas aplaudiendo para apoyarme y darme fuerzas. Eso me sorprendió muchísimo.

–Siempre dentro del deporte, ¿éste le permitió conocer una faceta diferente o impensada en gente conocida?

–La gente conocida siempre me trató bien, con respeto e incluso con admiración por la carrera deportiva.

–De no haber sido futbolista, ¿qué cree que hubiera sido de su vida?

–No me veo en otra cosa que no fuera futbolista.

–¿Qué lugar ocupa en su vida actualmente el fútbol?

–Muy importante y de hecho sigo jugando gracias a Dios. Junto a Aníbal, uno de mis hermanos, jugamos los domingos en San Vicente, los sábados y desde hace quince años en Ezeiza y los miércoles en Cañuelas con amigos y con asadito de por medio.

–¿El mayor logro deportivo? No necesariamente por el peso propio del logro en sí, sino por lo que representó para usted.

–Sin lugar a dudas haber podido estar dentro de una cancha de fútbol junto a mi hijo ‘Nacho’. Haber disfrutado de sus cualidades dentro de una cancha y haber salido campeón de la Liga Mayor de Monte Grande fue muy fuerte. También el hecho de haber conseguido amigos en Argentina y Sudamérica.

–¿El mayor fracaso deportivo? Si es que considera haberlo tenido. 

–No he fracasado en nada de lo que me propuse en el ambiente futbolístico.

–¿Qué consejo le daría a quien está por dar los primeros pasos en el fútbol?

–Que tenga mucha fe y voluntad y que no decaiga nunca. Que se proponga metas y que trate de cumplirlas paso a paso, día a día.

–¿Qué consejo le daría a quien busca convertirse en un profesional del fútbol?

–Que tenga ambición, voluntad y fe en sus cualidades.


Lic. Matías Folgueira - [email protected]

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