Casos fríos: el crimen del adolescente que cazaba liebres

En algo más de dos años se sabrá por qué y cómo un productor rural de nuestra ciudad arrolló con una camioneta Dodge Ram 4 x 4, negra, a un chico de 16 años que había salido a cazar a los campos con dos hermanos. Lo que más llamó atención entonces, son sus dichos. “Bien muerto está porque estaba robando”, disparó el victimario, en referencia al adolescente que había ido a robar en sus tierras. El cuerpo de Alex Juan Campo terminó tendido sobre el pasto y destruido por dentro, luego de ser aplastado por el estanciero, lo que le provocó lesiones mortales.

El Tribunal Oral Criminal N°4 de La Plata juzgará Rodolfo Pablo Sánchez, de 59 años, por el homicidio de Alex Campo, entre el 5 y el 8 de mayo de 2025. Esta tragedia ocurrió hace cinco años en las afueras de la ciudad y la víctima fue  un chico del barrio Guzzetti. El productor agropecuario espera en la Unidad N°9 de La Plata.

Alex -que era militante del Movimiento Territorial de Liberación (MTL)- había salido a cazar liebres al campo con sus hermanos, Agustín (19 años) y José Cabañas (22). Era frecuente que se metieran en las propiedades ajenas. En la mañana del 24 de mayo de 2020 ingresaron a una propiedad en el kilómetro 72,5 de la Ruta 205, cerca del paraje de El Taladro.

La vida del cazador adolescente habría terminado a causa de traumatismo cerrado de tórax y abdomen, además de un shock hipovolémico. Su menudo cuerpo presentaba traumatismo de cráneo, fracturas en la zona frontal y parietal izquierdo, asimismo una luxación de un fémur. Su muerte se produjo por el golpe y posterior caída.

Los chicos vieron a lo lejos una camioneta negra. Creían que desde el interior del rodado les iban a gritar que se fueran del lugar. No se fueron y la Dodge avanzaba cada vez más rápido. Comenzaron a correr. Los hermanos lograron salir de la línea que del conductor, que finalmente atropelló a Alex.

José y Angel gritaban. Le rogaron que lo subiera a la camioneta, que llamara a una ambulancia. Según los jovencitos, el conductor se negó y luego contestó: “Voy a llamar a la Policía y que hagan lo que tengan que hacer. Ahora levántenlo y llévenselo”. Alex estaba tieso.

Los peritos que realizaron la autopsia declararon que el nivel de aceleración de la camioneta, probablemente, haya sido superior a los 40 km/ph.

El hecho fue investigado por la UFI N°2 de Cañuelas, a cargo de Norma Pippo, quien procesó a Sánchez por “homicidio agravado por alevosía”, con una pena en expectativa de reclusión perpetua.

Luego, hubo un recurso de apelación de la defensa de Sánchez, a cargo de Fabián Améndola, que cambió la calificación de ‘homicidio agravado por alevosía’ a ‘homicidio simple’, cuya pena es de un máximo de 25 años de prisión. Ya antes la defensa del acusado había pedido la prisión domiciliaria, pero fue rechazada.

El abogado de la familia de la víctima, Maxi Rusconi, enfatizó: “Si en este caso tan particular, tan triste, tan desigual, donde la víctima fue tan vulnerada y el victimario mostró un comportamiento tan despreciable, si quedara impune sería una herida enorme para la familia sino para la sociedad”.