Fútbol de la B: ¡Y un día volvió a ganar en el Arín!

El elenco de Martín Perelman necesitaba una victoria por motivos varios ya que, según marca la inobjetable estadística, de los nueve puntos puestos en juego había rescatado apenas uno.
Fue en este marco en el que ‘el Rojo’, jugando en su propia casa, no sólo ganó sino que además lo hizo por una abultada diferencia producto de un juego certero por lo que no sería equívoco afirmar que en esta fecha el plantel de Perelman se ajustó al principio de las 3G: ganó, goleó y gustó.

El partido
Desde el instante mismo en el que el balón comenzó a girar, Cañuelas empezó a presionar en busca de la posesión como si el partido durara apenas unos segundos y no noventa minutos.
Del mismo modo cada vez que era ‘el Tambero’ el que tenía la pelota, la misma no duraba más que un par de segundos en los pies de sus jugadores dado que éstos se desprendían rápidamente de ella generando así veloces transiciones, algo buscado por este DT.
A esto se le sumaban las continuas proyecciones de los laterales, camino por el cual el local tuvo sus primeras aproximaciones.
Este combo le permitió a ‘el Rojo’ dominar el encuentro en su tramo inicial ante un equipo que intentaba realizar una faena similar, aunque sin obtener los mismos resultados.
Aquella superioridad roja se plasmó, por vez primera, cuando promediaba la primera mitad al conectar Aguirre de cabeza un córner luego de una mala salida del arquero Eros De Luca.
Apenas ocho minutos más tarde y tras una de las vertiginosas apariciones del africano Edjo, éste sacó un centro rasante que Suárez Costas, en una de sus tantas proyecciones, convirtió en gol.
Cañuelas no sólo llegaba sino que, a diferencia de otras fechas, convertía y aquí radicaba la gran diferencia respecto a lo sucedido en compromisos anteriores.
La UAI tuvo una chance para descontar con un tiro que se estrelló en el travesaño del debutante Tomás Lingua Bender aunque, cabe admitir, esta fue más una situación casual que una producto de la propuesta de la visita.
Ya sobre el final de la primera parte y después de una gran jugada colectiva a pura velocidad, toque y desmarque, llegó la habilitación para un afilado Aguirre que decretó un cómodo 3-0 que permitía pensar que la suerte del partido estaba echada, a pesar de que restara disputarse todo el complemento.

Segundo tiempo
La visita aprovechó un rebote fortuito siendo Vidal quien con una definición de potrero marcó un vistoso gol que sirvió solamente como para “no quedar zapatero”, como se dice en el picadito del barrio.
Con el 3-1 de ese momento, Cañuelas naturalmente se relajó sin que ello significara bajar la intensidad de su juego. Por el contrario, aquella cifra le dio tranquilidad como para encarar el resto del partido ante un equipo que no podía encontrarle la vuelta a la propuesta del vertiginoso conjunto rojo.
Los cambios comenzaron a sucederse con diferentes objetivos en cada bando: mientras que la visita buscaba cambiar la realidad que lo aquejaba, ‘el Rojo’ cambiaba para que nada cambie.
Estas modificaciones no lograron modificar justamente el paisaje del choque, en lo que hace a los intereses de la visita, no sucediendo lo mismo con el local dado que el cuarto gol fue obra justamente de un ingresado.
De hecho, ya en tiempo cumplido Cariaga desairó al ‘1’ visitante habilitando, en un gesto de gran generosidad, al ingresado Tomás Alvarez quien puso el 4-1 definitivo.

Lo que se viene
Por la quinta fecha de la temporada ‘el Tambero’ visitará, el martes próximo, a Talleres de Remedios de Escalada que viene de caer, por 2-1, ante Flandria.
En el ‘Mil Rayitas’ milita el maximopaceño Alejandro Noriega, quien debutó en ‘el Rojo’ para luego protagonizar una importante carrera en el fútbol de ascenso.

¡Rompió el maleficio!

Esta victoria significó la rotura del maleficio, si es que existía uno, por el cual Cañuelas no podía ganar de local. En este sentido cabe recordar que el último triunfo en el Arín se dio en noviembre de 2019, cuando el elenco en ese entonces dirigido por Iñiguez-Márquez venció a Berazategui en lo que fue el partido previo a la consagración lograda en Rosario.
Desde entonces y pandemia mediante, cabe admitir, pasaron prácticamente dieciséis meses sin que ‘el Rojo’ lograra imponerse en su casa.

La mágica cuarta fecha
La realidad marca que, al menos para ‘el Tambero’, el cuarto compromiso del torneo en el que debuta es trascendental.
De hecho del mismo modo en que la primera victoria en la Primera B se dio en la mágica cuarta fecha, lo mismo sucedió en la primera participación de ‘el Rojo’ tanto en la D como en la C.
En este sentido vale puntualizar que el primer triunfo en la D se logró un 7 de mayo de 1975 ante Deportivo Paraguayo,  justamente en la cuarta fecha del certamen. En aquella ocasión la victoria tambera fue por 2-1, en ‘el Cajón’, con goles de Alberto Noriega y Pedro Iriarte.
Del mismo modo el 24 de septiembre de 1996 Cañuelas recibió, por la cuarta fecha de su primera temporada en la C, a Barracas Central al que venció por 4-0, con tantos que llevaron la firma de Marcelo Luchetti, Luis ‘Tucán’ Delgado, Carlos ‘la Vieja’ Moreno y Gustavo Coronel.

Lic. Matías Folgueira – matiasf@elciudadano.com.ar