Emiliano Arrieta volvió a Cañuelas por el amor a su hija
El volante surgido de los Torneos Barriales, y formado en Lanús, debutó en Primera en el Akademisk Boldkclub de Dinamarca. Ahora, vestirá la camiseta del ‘Tambero’, club de sus amores, en un equipo compuesto por varios pibes.
Emiliano Arrieta despuntó su pasión por el fútbol en el barrio Libertad y por su nivel, tras un breve paso por la Escuela de Fútbol Infantil de Cañuelas (EFIC), recaló en Lanús. Así, hizo los deberes en todas las Inferiores y tuvo su gran chance en Europa, donde debutó como profesional en el Akademisk Boldkclub de Dinamarca.
Con un puñado de partidos en un país “distinto” -en todo sentido- sumó experiencia y regresó al barrio para formar parte de otro desafío.
El volante de 19 años, que sumó minutos en los amistosos ante San Telmo, Provincial y ayer contra la Reserva de Huracán, regresó para estar cerca de su familia. Aunque hubo una integrante que terminó de inclinar la balanza.
-¿Qué fue lo que te motivó para pegar la vuelta?
-La que terminó de convencerme para volver fue mi hija (Aitana). No la pude tener a upa hasta los cuatro meses y medio. Por eso quería llegar al país lo antes posible. Me perdí la parte más linda de su vida. Me enteré de que iba a ser papá allá. En principio, elegí quedarme para que a ella no le falte nada, pero estuve afuera en la etapa del embarazo, los chequeos, y todo lo previo.
-¿Ahora estás en tu casa de Cañuelas?
-Sí, tal cual. Esto lo tomo como un regalo. Poder jugar de nuevo acá y estar cerca de todo es algo que nunca me había tocado. Va a ser todo nuevo: que mi familia me pueda ir a ver. Y sobre todo mi mamá, a la que siempre quise llevar a todos lados y no pude.
-¿Cómo fue tu año en Dinamarca?
-Fue una etapa de aprendizaje, de experiencia. Es otro fútbol, otro idioma. Fue muy positivo porque tuve rodaje en Primera. Volví maduro y me hice muy fuerte de la cabeza.
-¿Qué te preguntaban tus compañeros daneses sobre nuestro país?
-Antes que nada, querían saber sobre Messi y Maradona. Sentí un orgullo tremendo cuando veía que querían charlar para saber cómo se vive en acá, las costumbres y todo lo lindo que tenemos.
-¿Hay mucha diferencia entre nuestro fútbol y el europeo?
-Sí, allá se labura mucho la resistencia y lo físico; en cambio, acá se tiene en cuenta el manejo de la pelota. Me costó al principio, pero por suerte tuve una buena pretemporada y aproveché la base que había hecho en Lanús.
-¿Cómo ves el Ascenso?
-Al principio, imagino que me va a costar adaptarme al roce y a la gente que putea en la cancha (se ríe). Pero no me veo mal; tengo muchas ganas y toda la fe del mundo.
-¿Estuviste siguiendo la campaña de Cañuelas?
-Sí, estoy al tanto de lo que fue el año pasado, donde los chicos tuvieron que pelearla. Sinceramente, fui siguiendo todo lo que pasó por las redes sociales. Va a ser un año duro, el club apostó a los pibes y es una gran oportunidad. Esperamos que la gente tenga paciencia y que banquen esta oportunidad hermosa.
-¿Cuál es tu objetivo en este 2024?
-Ahora quiero sumar minutos, tratar de enfocarme en lo mío y hacer todo lo que pueda para que el equipo sume puntos. Y seguir ganando experiencia en una liga totalmente distinta.
-¿Volverías a Europa?
-Sí, esa es la idea. Al estar afuera se te abre la cabeza, conocés otros lugares, otra gente, otro fútbol: es algo muy lindo. Voy a estar enfocado mientras me toque estar acá, pero uno siempre sueña con salir del país y progresar.