El calvario de un local de autopartes que sufre una estafa

La cola de autos en Mitre 681 es llamativa. Es que desde el verano, estafadores utilizan el nombre de “El Vasco”, uno de los locales del centro con 52 años de experiencia, para comercializar repuestos y terminan engañando a la gente. Dante Etcheverry, el dueño del negocio, le detalló a El Ciudadano el modus operandi.

“Crearon una cuenta de Instagram con todos nuestros datos, con un logo en color rojo. Desde ahí ofrecen de todo, motores, cajas, radiadores y hasta partes que nosotros no vendemos. El punta está en que ofrecen productos a un valor llamativo: es el gancho que usan para engañar a toda la gente de Cañuelas, porque por esa vía llegan a todas las ciudades”, arrancó  Etcheverry, que ya plantó el cartel de advertencia en el frente del local para que la gente deje de seguir al perfil trucho en las redes sociales.

En Facebook,  la página oficial tiene un logotipo gris con el nombre escrito en mayúscula. Además, aparecen la dirección, el WhatsApp y el mail (danteetcheverry@hotmail.com). Si uno recorre el espacio, hay publicaciones desde hace varios años. 

“Una vez que captan a un cliente, piden la transferencia. Cuando las personas dudan, mandan todos los datos de nuestro local, por eso todos vienen a quejarse con nosotros. Una vez que se realiza la compra por Mercado Pago o el banco, desaparecen. Claro, luego vienen acá con todos los nervios encima”, detalló el comerciante, que agregó que reciben 15 llamadas por día a raíz de estas estafas. “Hasta en el Google Map nos bajó la reputación, la gente nos deja comentarios negativos por culpa de estos ladrones, tratamos de aclarar sobre el inconveniente, pero no alcanza”, comentó indignado el hombre.

Según el procedimiento, la banda utiliza un teléfono con característica 011. Una de las empleadas aportó un dato no menor: “La gente viene muy disgustada, a nadie le gusta que le roben la plata de esa manera, pero nos cansamos de aclarar que hay una cuenta trucha. Una de las últimas víctimas comentó que le llamó la atención la negociación con esta gente por un embrague: sólo contestaban durante la mañana en una franja precisa, algo que se da habitualmente con los grupos delictivos que operan desde las cárceles”.

En el medio de la nota, dos muchachos se anuncian para retirar dos modelos de bombas de agua para una camioneta que justamente, no se venden allí. Los nuevos damnificados se retiran con bronca y la llegada de nuevos automovilistas sigue en el local céntrico…

“Creemos que puede ser gente de Capital, aunque eso no podemos afirmarlo, porque los teléfonos pueden ir rotando. Lo que sí sabemos es que utilizan a terceros para realizar las transacciones por los bancos”, explicó Dante. El comerciante expresó que es imposible denunciar a alguien que no tiene una identidad marcada. “Nos queda mostrar nuestro problema para que no caiga más gente. Además, se pone en juego nuestro comercio. Hay que tener mucho cuidado porque los engaños se están propagando, el otro día me comentaba un colega de “Respuestos Rivadavia” y otro de “Frenos Cañuelas” que estaban empezando a pasar por lo mismo”.