Leonardo Colombo: “Uno no sabe lo que podría haber pasado si hubiera ido a River”

Deportes 01 de febrero de 2022 Por Lic. Matías Folgueira
Con 52 años recién cumplidos, ‘Lalo’ hace un repaso de una carrera que tuvo su mayor relevancia durante los noventa, en Quilmes. De la Primera D en Cañuelas FC saltó al fútbol grande. Y es un orgullo local.
colombo y familia en inauguracion estadio estudiantes b
‘Lalo’ Colombo y sus hijos, en ocasión de la inauguración del estadio de Estudiantes de La Plata.

El apellido Colombo es sinónimo de fútbol en Cañuelas. Y está asociado, a la vez, al club ‘Tambero’, dado que diferentes generaciones de esta familia vistieron la casaca a bastones blancos y colorados.

Pero uno de ellos, en particular, trascendió al plano local haciendo del fútbol su profesión durante mucho tiempo. De Leonardo Javier Colombo se trata.

De hecho, ‘Lalo’ llegó a jugar en el fútbol grande, convirtiéndose en figura y referente de Quilmes, aún hoy en la actualidad.

Nunca fue fácil trascender aunque, vale admitir que en estos tiempos, existen ciertos factores que posibilitan otro tipo de relación con los grandes clubes. Un ejemplo, en este sentido, es el de los medios de transporte, un verdadero trastorno a mediados de los ochenta.

Sin embargo, en aquel cuadro de situación y a fuerza de fútbol, ‘Lalo’ rompió aquellas barreras protagonizando una gran carrera, fundamentalmente en Quilmes, club en el que lució la ‘10’ entre 1990 y 1999 en 252 encuentros, viviendo también grandes momentos en Gimnasia y Esgrima de Entre Ríos.

Los primeros pasos en el fútbol fueron dados en Cañuelas FC, en la Primera D, donde incluso compartió el equipo con su hermano,  José Raúl, el ‘Bocha’ Colombo. ‘Lalo’ dejó el ‘Rojo’ y luego defendió los colores de Platense, San Martín de Tucumán, Juventud Antoniana (Salta), Temperley, Guaraní Antonio Franco y Blooming (Bolivia), entre otros, además del ya citado elenco cervecero.

“El fútbol me dio la posibilidad de hacer lo que me gustaba ya que, de hecho, desde chiquito sabía que quería ser jugador. También, me brindó la chance de vivir de esto, me permitió conocer lugares, gente y hacer amigos”, le dice a El Ciudadano.

Como en todo deporte que se practica profesionalmente, el fútbol también suele ser un sacrificio para sus protagonistas: “Me fui de Cañuelas siendo muy chico y eso me sacó tiempo para estar con mi familia y compartir cosas, pero el fútbol es lo que elegí”. En esa misma línea, Colombo reflexiona: “Ese mismo tiempo en el que no pude estar con mi familia tampoco lo tuve para estar con amigos a una edad particular como la adolescencia, dado que siempre había que jugar, concentrar o viajar”.

Al momento de contabilizar las ganancias generadas por el fútbol, Colombo es conciso: “Muchos amigos, cierto prestigio y un reconocimiento, que es más importante, incluso, que el dinero”.
Con 52 años recién cumplidos, Colombo sigue de cerca la actualidad de su hijo Nazareno, representante de una nueva generación de este apellido que no solo formó parte de seleccionados juveniles; además ya debutó en Primera División.

“Hoy, con el diario del lunes y mucho tiempo después de haber dejado de jugar, te digo que si pudiera volver el tiempo atrás haría cosas que no hice y tomaría otras decisiones. Uno siempre toma determinaciones pensando en que es lo mejor, pero nos equivocamos. Hoy, con esta cabeza, tomaría decisiones diferentes”.

La referencia tiene que ver con River. En pleno ascenso de su rica carrera profesional, cuando era cada vez más destacado en Quilmes, se produjo un hecho que aún hoy, si bien no le quita el sueño a Colombo, permanece en su pensamiento relacionado al “que hubiera pasado si...”.

El propio Colombo lo explica con estas palabras: “Cuando tenía 21 años (1991) vinieron a buscarme de River Plate, pero el club (Quilmes) no me dejó ir. Uno no sabe lo que podría haber pasado si hubiera ido a River, pero bueno... Ya pasó y me quedó la alegría de saber que uno hacía las cosas bien y que estaba siendo observado”.

La vocación del fútbol

  • “De chico quería ser veterinario, pero en la escuela fui un desastre”.
  • “A los 13 o 14 años ya tenía claro que iba a ser futbolista y que quería lograrlo. En el camino hay muchas cosas que pasan y que hacen que uno llegue o no: suerte, constancia, problemas, etc. Es un camino largo, pero siempre estuve convencido”.
  • “Estoy sumamente conforme con mi carrera y, si volviera a nacer y pudiera elegir qué ser, elegiría lo mismo”.
  • “He sufrido mucho con el tema económico dado que en el ascenso cuesta mucho cobrar, pero no me arrepiento de nada y estoy feliz con lo que hice”.

PERFIL

Del ascenso con Quilmes al retiro en Bolivia

Leonardo Javier Colombo nació el 16 de febrero de 1970 en Cañuelas. Fue un volante que jugó en el fútbol profesional 476 partidos y marcó 62 goles en diferentes categorías. En ese sentido cabe mencionar la Primera División, el Nacional B, la Primera B y el Federal B. Fuera de esta vasta estadística se encuentra el paso de ‘Lalo’ por el fútbol de la D, absolutamente amateur en aquella época y sin registros en la década del ochenta.

Durante muchas temporadas, Colombo jugó en Quilmes. No lo hizo solamente en el viejo Nacional B, donde fue campeón y logró el ascenso; también, en el fútbol grande.
En Primera División, además, vistió la camiseta de Platense.

“Conozco gente que ha jugado en excelentes clubes, incluso de Europa, y no han tenido la suerte de salir campeones, algo que yo pude vivir en Quilmes en 1991. La felicidad, el momento que se vive es único, un instante de gloria que no todos tienen la posibilidad de vivir”, cuenta con orgullo.

En el Nacional B, Colombo jugó, además, para San Martín, Juventud Antoniana y Gimnasia y Esgrima de Concepción del Uruguay.

“Si bien no se nos dio, jugar una final y una promoción con Gimnasia y Esgrima de Entre Ríos fue algo que viví al mismo nivel emocional que aquel título con Quilmes. Movilizamos una ciudad y una provincia. Incluso, a pesar de haber perdido, la gente nos fue a recibir a la ruta y al estadio. Fue algo increíble. Yo tenía 32 años, estaba ya terminando mi carrera y eso hizo que lo viviera de otra manera”, recuerda.

Antes del retiro, Colombo jugó en la Primera B para Temperley y en el Argentino B para Guaraní Antonio Franco (Posadas), realizando una breve intervención en el Blooming de Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) en 2003.

Te puede interesar