Fue una propuesta desafiante. Volver a un escenario cañuelense tras más de cuatro meses de prohibiciones de espectáculos con la presencia de espectadores y la responsabilidad recayó en dos adolescentes, Ludmila Meji y Javier Gutiérrez –de 16 y 20 años respectivamente– que inauguraron con sus canciones el Autocine Cañuelas el pasado jueves.

Hace aproximadamente un año que desarrollan más seriamente un proyecto en conjunto pero formaron la dupla con anterioridad, actuaron en distintos locales de la ciudad, eventos privados y deportivos relacionados al polo. Incluso fueron parte del show de la final de la Copa Cañuelas que se disputó en Palermo. Por el momento hacen variados covers a su estilo de rock, cumbia, reggaeton y hasta algún cuarteto.

Se conocieron en la Escuela Técnica Nº1 por medio de una profesora y comenzaron a practicar. Así se dio una etapa de pruebas e intercambios musicales hasta que decidieron formar un dúo.  

Javier hace varios años que se radicó en el distrito y contó a este semanario “soy de Córdoba y nos mudamos a Cañuelas cuando tenía 11 años. Allá comencé a tocar y luego dejé por la mudanza hasta que empecé otra vez en el Instituto Cultural Cañuelas y con profesores particulares. En Cañuelas hay un montón de músicos y en mi opinión son buenos y te dan ganas de seguir aprendiendo porque siempre ves gente haciendo música”. 

Por su parte, Ludmila recordó “en quinto grado empecé a tocar la guitarra, fui al Instituto Cultural y tomé clases por dos años con Claudio Astudillo. En mi pieza practicaba y cantaba, pero nunca mostrándole a mi familia. Después de unos años empecé a cantar enfrente de mis papás, era muy tímida hasta que en los actos del colegio y con familiares fui perdiendo la vergüenza. Pero nunca tomé clases”.             

Ambos estuvieron en las dos primeras jornadas del autocine –jueves y viernes– para inaugurar el novedoso emprendimiento y rompieron con meses de escenarios cerrados. Pasadas las ocho comenzó el show, duró alrededor de 30 minutos, y estuvieron acompañados por el animador del evento Tute Showman. El público sintonizó por radio el sonido por lo que el mismo fue muy bueno, ya que la música se escuchó dentro de cada vehículo.

Show en la final de la Copa Cañuelas disputada en Palermo. 

Los jóvenes artistas eran concientes que serían los primeros músicos en tocar con público en el período de confinamiento y Ludmila aseguró “estábamos re nerviosos. Antes de la pandemia empezábamos a tocar más sueltos, en bares o restaurantes y retomar eso me daba el triple de miedo. Pero subimos al escenario y sentías la energía positiva que había entre la gente, así que perdí la vergüenza, al tercer tema eran todo bocinazos y luces. Hicimos más temas de los pactados y la gente muy copada con la nueva experiencia. En este último tiempo estuvimos aprendiendo un montón, desde aprender a ensayar, hasta mejorar la conexión entre nosotros. En este último año mejoramos todo y es mucho más fácil” y agregó: “somos los primeros en subir a un escenario y sentía muchos nervios, era como que nosotros íbamos a marcar eso. Tampoco estaba pactado que en vez de aplaudir se iba a tocar bocina o prender las luces entonces era como que teníamos que marcar eso porque no se puede aplaudir. Estuvo buenísimo y se vio también en las redes sociales”. 

Por su lado, Javier comentó “nos dijeron para hacer tres temas y terminamos haciendo cinco porque la onda fue muy buena. Vos terminás de tocar el tema y esperás los aplausos del público pero había todo silencio; así que implementamos que en vez de aplaudir toquen bocina o prendan las luces como para sentirnos más cómodos. Estuvo buenísimo y se escuchó, la respuesta fue diferente, es medio difícil porque solo ves autos pero te acostumbrás”.

En Instagram se los puede seguir como Javi¬¬_ludmi y en Facebook como Javi Ludmi.

Marcelo Romero - [email protected]