Fernando Samartin, el imitador de Sandro, llega esta noche al Cine Teatro Cañuelas

Fernando Samartín brinda un verdadero ‘Culto Gitano’ a Sandro, la estrella que sigue vigente. De la misma manera que lo hizo en el Teatro Gran Rex, el Luna Park y el Ópera, traerá todo el repertorio conocido del ídolo, esta noche a partir de las 21, al Cine Teatro Cañuelas. Además, adelanta en exclusiva con El Ciudadano el gran cumpleaños 80 del símbolo de la música romántica.

-¿Qué significa ponerse en la piel de una figura tan importante?
-Requiere mucha responsabilidad, si lo pienso, no lo hago más (risas). A veces, hay que ser inconsciente para hacer de Sandro. La paso muy bien, siento que la gente lo extraña y el público lo acepta. Y no hay vueltas, yo vendo una ilusión.

-¿En qué momento de tu vida decidiste hacerle un tributo?
-Cuando miré la película ‘Operación rosa’. Ahí lo vi en su plena juventud, con sus movimientos, y dije ‘quiero hacer esto’. Es que hasta el momento, lo veía a él como un ídolo dentro de un ambiente de mujeres grandes que le tiraban rosas o bombachas. Pero hice un click y no paré más, arranqué jugando con mis amigos.  Me crié en Avellaneda, a un par de barrios de Valentín Alsina, donde comenzó su gran historia. Hoy tengo 40 y sigo en la cuestión.

-¿Cuál es la canción que más disfrutás interpretando?
-Todas, porque todas tienen su magia. Pero hubo un antes y un después desde que hice ‘El maniquí’.

-¿Después del show seguís compenetrado en el papel de Sandro?
-No, para nada. Cruzo la pata, como digo, y soy Fernando. Me da cosa cuando me piden una foto y estoy vestido como él. En realidad, nunca hubo una confusión, entiendo que todo no es mío, no inventé nada. Interpreto con mucho respeto.

-¿Qué diría Sandro sobre la música de hoy?
-Estaría aggiornado, porque siempre fue un adelantado, pero andaría preocupado por palabras en desuso y por algunos términos. Si no le gustaba ‘Entregá el marrón’ de Los Auténticos Decadentes, imagínate ahora… Creo que hoy estaría feliz por los pibes que improvisan y hacen rap. A su modo, anticipó todo, fue el primero en armar monólogos, en tener un espacio de radio y dejar cantar a otros en la década del ‘90. Sin querer, ya hacía ‘features’.

-¿Cómo te convertiste en ilustrador?
-La verdad es que siempre dibujé. De hecho, pensaba que mi futuro iba a venir por ese lado, hasta soñé con trabajar en Disney. Todo el tiempo estoy dibujando, vivo del arte. Tengo colecciones y figuras todo el tiempo. Respecto a Sandro, me focalizo en él para las redes sociales. Hace poco hice muchas ilustraciones sobre Antonio Gasalla y la gente respondió.

-¿Cómo sigue la gira?
-Hay varias fechas programadas: Azul, Tandil, Olavarría, Morón, Salta y Tucumán, entre otros lugares. Es un 2025 intenso y el 19 de agosto voy a tocar en el Gran Rex para festejar el cumpleaños 80 de Sandro.