La locura por el Mundial y la falta de dinero en efectivo de los cajeros estatales demoraron la salida de las compras para las fiestas navideñas. Y los vecinos, tardíamente, se movilizaron a los locales recién entre el jueves y ayer. Inclusive hoy se espera un gran movimiento comercial en Cañuelas.

Poco a poco, según coincidieron los comerciantes en la recorrida de El Ciudadano, la gente va entrando y después de alguna recorrida cotejando precios y calidades se lleva el regalo que buscaba para el arbolito.

En estos días, las compras a las que convoca la Nochebuena le otorgan otra fisonomía al centro comercial. En la plaza San Martín se montaron un centenar de puestos, a cargo de emprendedores locales, con regalaría, decoración, manualidades, indumentaria y gastronomía. Además, hubo música con el Ensamble del Instituto Cultural, Jonathan Burgos, Bruno Carabel y la agrupación folclórica del colegio Don Bosco de Uribelarrea. Además, brilla la estrella gigante en avenida Libertad y del Carmen, y otra alegoría navideña decora la avenida.

La facturación de los negocios se mueve, fundamentalmente, por los descuentos bancarios, las cuotas de las tarjetas y el efectivo cuando se ofrece una rebaja por esa forma de pago. Y como viene sucediendo, las expectativas se ubican a último momento.

Sofía es una emprendedora, con sus productos Wannabe, que vende desde su casa y por las redes. Por esta festividad hizo una feria en un garaje en Libertad al 1300. El lugar lo compartía con productos de decoración que hace su madre. “Viene un poco flojo, salvo algunas cosas personalizadas que hago. Creo que con la superposición del Mundial y la Navidad estamos en otra todavía”, evaluó la joven.

Gustavo Sacco, titular de la Cámara Comercial de Cañuelas, opinó que “hay mucha expectativa de ventas. Se prepararon los negocios para tener buenas ventas. Hay varios bonos y el aguinaldo, lo que hacen que se produzca una dinámica fuerte para estas fechas. Pero las subas no se detienen, no hay ningún efecto con los Precios Cuidados, nunca resultó. Y una décima en un mes de baja en los precios, es una burla. Pero hay mucha expectativa entre la gente para consumir y el comercio, de recibirlo. Se esperan excelentes ventas, con un adicional del triunfo del Mundial, que hizo estallar la demanda de cotillón. Mientras la gente tiene un peso, lo disfruta con la familia”.

A la salida de la juguetería Rolo, frente a la plaza Belgrano, Javier y Mariana, apuntaron: “Compramos para dos nenas. Salimos con cuatro regalos que costaron más de 11 mil pesos, después de mirar precios. Pagamos en efectivo y tuvimos un descuento. Nos falta a un varón de 18 años, cuyo presupuesto será otro y por una prenda de vestir”.

La titular de Oveja Negra, una casa de ropas de diseños y zapatillas en Florida 534, indicó

como balance de esta semana: “Puse muchas cosas en liquidación y promos en efectivo. Hablando con otros locales, noviembre fue muy planchado y diciembre especula con el aguinaldo, pero está tranquilo. Nos preparamos con otra expectativa”.

En la casa de artículos de librería y juguetería Pipa, en Libertad 633, Héctor Conde precisó que “hay mucha venta con las promociones de las tarjetas; inclusive algunos ya llevan algunas cosas del colegio como cartucheras y mochilas”. Por otro lado, dijo que la inflación en comparación del año pasado fue de un “70 por ciento a un 80 por ciento”. En su negocio las pistolas de agua, se pueden adquirir desde 800 pesos a 12.000 pesos”. Y se prepararon para trabajar con horario corrido y hasta las 21 del sábado.

En la gama de posibilidades, en un local de productos chinos de Acuña 555, la pareja de Macarena y Elías, ambos del casco urbano, precisaban ante El Ciudadano. “Compramos para sobrinos de 3 y 4 años. Y gastamos por cada uno cerca de 4 mil pesos. Es un micrófono con música y autitos”, respondieron, para luego aclarar que “tuvimos que dar algunas vueltas para no gastar más”.

Con un local en Lobos y otro en Cañuelas, desde la vinería en Belgrano 578, Leonardo Alem comentó que “no hay ventas significativas. Y los regalos de empresa no son como de otros años. Están mandando una botella a un gerente, antes eran cajas y hasta para empleados. Vienen frenadas las ventas. Esa es mi impresión. Cuando analice los números sabré efectivamente. Sí ya pude confirmar que desde octubre y noviembre cayeron las ventas en términos de unidades”.