Es harto frecuente la cantidad de minutos que los concejales se dedican a monologar mediante el planteo de las mociones de privilegio que demoran más allá de cualquier medida razonable el tratamiento de los proyectos que el Concejo debe considerar. Y en ocasiones lo hacen sobre temas que nada tienen que ver con el distrito o para lanzar chicanas al bloque opositor.
“Creo que ya hay que rever este tema de las mociones de privilegio. Se ha tergiversado, se le da otro sentido y lleva una extensión en el tiempo, que hace que por un 60 a 70 por ciento del tiempo en el Concejo, haciendo uso de esa cuestión, cuando ningún concejal le puede contestar al que habló, para tener muy poco tiempo a los temas y proyectos que traemos. Es un tema a rever y que hace a la calidad institucional”, consideró Eduardo Recalt, desde Juntos por el Cambio, en la sesión ordinaria del 21 de octubre.
Al respecto, el concejal hizo mención a esta cuestión, que permite que los legisladores locales pueden manifestarse sobre cualquier asunto que no se encuentre planteado en los temas parlamentarios del día.
“Siempre las mociones deben ser con respeto, porque si digo cualquier cosa del otro bloque y del otro lado no puedo responder, no tiene sentido y no hace bien a ninguno”, completó el hombre del PRO.
Las observaciones del opositor llegan después que se viene dando esta serie de conceptos y críticas del Frente de Todos sobre lo que fue el gobierno de Cambiemos en el orden nacional y provincial, durante las cuestiones de privilegios, para de ese modo llegar a golpear al bloque de concejales opositores .
Según la presidencia del Concejo, los concejales locales tienen 15 minutos para espacio de exposición. Recalt sin embargo, en la última sesión del Concejo, se mostró sorprendido por ese lapso y comentó: “Desconozco si eso lo señala el Reglamento. Pero en ese caso hay que rever esos minutos que se hacen muy extensos y que poco contribuyen a la calidad de vida de los cañuelenses”.

Leandro Barni – leandrob@elciudadano.com.ar