Boxeo: Tomás Mastronardi ganó en Sinaloa, sigue invicto y asegura que aspirar a ser "campeón del mundo"

Tomás Mastronardi es uno de los boxeadores argentinos con mayor proyección en el exterior. Con nueve peleas ganadas (cinco por la vía rápida), el Súper Welter que vive en México dejó en el camino a Agustín Guevara en el Centro de Convenciones Mazatlán Internacional Center de Sinaloa.

“Me sentí muy bien, pese a que hace nueve meses que no peleaba. Mi inteligencia y mi velocidad predominaron y por eso pude ganar”, contó Mastronardi, que dejó en el camino al local (5G y 5P) con una mano certera en el cuarto asalto (la pelea estaba pautada a seis rounds).

“Sinceramente, no recibí golpes. Me lastimé la mano derecha en una piña que di y tuve el puño medio jodido, pero me acoplé a la estrategia, con golpes certeros y buena distancia. Siento que cumplí, fue de menos a más y se dio todo tal cual lo planifiqué en el gimnasio”, le dijo el cañuelense a El Ciudadano a la distancia.

Mastronardi hizo todo a la perfección hasta ahora. Y no solamente por los resultados obtenidos. Sigue puliéndose en México, cuna de grandes batalladores, y con Estados Unidos a un paso. La Meca, con todo el patrocinio, el glamour y los grandes maestros, le tiene asignada una prueba en algún momento.

El boxeador de 25 años, que arrancó a tirar manos gracias a Gustavo Bastiano y se moldeó en el gimnasio de los Daneff, volvió con la idea fija al enfrentar el micrófono: “Siempre lo repito, busco ser campeón del mundo. Espero volver a dar una buena función y noquear, que es lo más lindo. Es el gol al minuto noventa (risas). Ojalá que pueda tener enfrente a un rival de categoría así llego a la altura y me puedo mostrar ante el mundo del boxeo”.

Hablar de fútbol no es un tema ajeno para Tomás, quien reconoció en otras notas con este medio de que fue tratado muy bien por el público mexicano. Además, el peleador nunca ocultó su fanatismo por Lionel Messi en la tierra del ‘Canelo’ Álvarez, uno de los boxeadores top que chicaneó alguna vez con ‘Leo’.

Por otra parte, su combate, que iba a ir en vivo por ESPN, finalmente no fue transmitido por cuestiones de programación de la organización. Es por eso que el púgil insistió en brindarle disculpas a todo el pueblo: “Mucha gente de Cañuelas me escribió para decirme que estaban esperando mi pelea, pero se fueron corriendo los combates y al final, el mío no fue televisado”.

“Estoy con chances de ir a Estados Unidos, pero no a pelear. Por ahora voy a seguir en Guadalajara. Si hago un buen papel en esta pelea, tendré la oportunidad de firmar con BoxStar, la empresa que me da posibilidades para mantenerme activo y con rodaje”, comentó el cañuelense.

“En mi última pelea me fracturé la nariz, por eso estuve parado tanto tiempo. Espero agarrar movilidad para sumar peleas y tener la gran chance, tengo que gustar a la hora de la definición de las batallas”, agregó el deportista invicto, que está radicado en México desde 2020.