En Juntos por el Cambio no tienen dudas de que hubo una falta grave: Romina Marques Antunes está en la mira con su par de bancada Mirta Barcia. Una reunión más de una comisión del Concejo Deliberante de Cañuelas se convirtió, a su juicio, en una acción sospechosa y las acciones van en esa línea.
Hablan como de un golpe y un atropello, hasta de un accionar que “van por todo”, asestaron en el bloque de Juntos por el Cambio, según supo este medio.
Hasta ahora no lo valoran como un presunto delito, pero hablan de una supuesta falsificación de firma de una concejala del Frente de Todos en una reunión legislativa donde no participó. 
El lunes 5 había una reunión de la Comisión de Legislación, la que integran los ediles Maximiliano Mazzanti, Romina Marques Antunes y Diana Barcia, por el bloque del Frente del Todos; mientras que, por la oposición,  la componen Natalia Blasco y Carlos Alvarez. Ese día no participaron los cambieistas y se había avisado que tampoco estaría Marques Antunes.
Para que dichas reuniones de comisión tengan sesión debe haber tres miembros. Tras finalizar el encuentro se gira un acta de la sesión a los integrantes de cada comisión. Y para este caso figuraban Mazzanti, Barcia y también Antunes.
En Juntos por el Cambio coinciden con un diagnóstico de sospechas, aunque no tomaron ninguna medida hasta este momento. Tampoco hubo al respecto una mención –pública- por el Frente de Todos.
Es sabido que falsificar sobre un instrumento público es un delito. Y en este caso sería sobre un libro de actas y ejercido por funcionarios públicos.
El Concejo Deliberante cuenta con un reglamento interno que dispone de sanciones disciplinarias ante algunas conductas.
Luego de conocerse entre los corrillos del Concejo esta situación de la reunión de la Comisión Legislativa, la concejala Antunes solicitó licencia, la que incluyó ser reemplazada en la segunda sesión ordinaria del Concejo del jueves 8. Su banca fue ocupada por Marta Zamora. Por otro lado, esos proyectos de la Legislativa no figuraron en este orden del día. Cuando se creía que habían salido por mayoría, fueron retirados al advertirse que había una firma adulterada, de alguien que no había estado presente en una reunión de labor parlamentaria. Es hasta el momento la primera y única medida al respecto que hizo el Concejo. Todo ello sin explicaciones.
“No había un temario específico, ni polémico en la reunión Legislativa, a pesar de haber una carpeta importante de despachos”, sostuvo un integrante de la oposición.
Entre los opositores el tema no se resuelve. Al cierre de esta edición se sabía que tienen copia de ese acta y estaban analizando pedir sanciones a nivel administrativo sobre Antunes. Pero no sabían quién firmó por la concejala opositora. Otros analizaban si no había que llevar el tema a una instancia penal. En tanto que entre el oficialismo hay incomodidad por lo ocurrido y además que el tema haya trascendido. Pero no hay tanta molestia por el hecho de truchar una firma de un libro de actas de concejales.

Leandro Barni – [email protected]