La madre de Alan Joaquín Moreno, el joven de 21 años que murió al día siguiente del domingo 10 luego de sufrir un accidente con su moto y una camioneta, en Máximo Paz, se comunicó con esta redacción para realizar un pedido de justicia y que se esclarezca el caso.
Mónica Burgos, de 49 años, mamá de la víctima,  manifestó: “está todo en manos de la justicia. Pusimos un abogado y es el segundo hijo que pierdo, también en un accidente de tránsito. Aunque sé que el que chocó a mi hijo no salió a matar a mi hijo, pero se manejaron mal tanto él como lo que sucedió después del hecho. Estuve de acá para allá con trámites en la Comisaría de Máximo, con una lluvia intensa, donde fui muy mal atendida por un oficial de apellido Gutiérrez hasta que pude ser atendida correctamente por el titular de la Comisaría. Escucho muchas cosas, pero me tengo que guiar por lo que dijeron dos testigos. No estoy buscando el resarcimiento económico con esto”, contó a este medio.
La mujer dijo que “quiero saber lo que pasó. Si no era mi hijo le pasaba a otro porque dobló como venía. Quiero que lo inhabiliten a este señor como conductor. Y hubo abandono de todo, encima somos gente que nos conocemos”. Y luego agregó: “No le hacía mal a nadie, cortaba el pelo, hacía changas de albañil, vivía conmigo y sus hermanos. Lo había ayudado a comprar algunas cosas para la peluquería que atendía en mi casa. Le arrebató la vida con 21 años y dejó a una familia hecha bolsa, con una madre que está sola y lucha para salir adelante”.
Joaquín murió en un accidente de tránsito en pleno centro maximopaceño. Sobre si el chico estaba con casco la progenitora desconoce si lo llevaba.
Por este caso la justicia imputó a Juan Carlos Cagliari por ‘homicidio culposo’, acusado de haber embestido con una camioneta Peugeot 504 al joven que manejaba una moto de 110 de cilindrada. Luego de unas horas la víctima perdió la vida en el Hospital Regional Cuenca Alta ‘Néstor Kirchner’. “Hicieron de todo en el hospital, de lo humano a lo médico, pero ya sabía íntimamente que no iba a salvarse. Estaba con muchos golpes de cabeza y el maxilar roto en varios pedazos, golpeado la pierna, pasó tres operaciones. Luchó hasta donde pudo”, destacó la señora que es pensionada y separada hace unos pocos años del padre de la víctima.
Sobre los motivos por los cuales su hijo había salido esa noche no los conoce. “Capaz que fue a lo de una amiga mía, lo de una chica, nadie lo sabe. Solo él lo sabe”.
“Quiero estar tranquila, pero sabiendo lo que pasó. No busco plata. Quiero que ese hombre no se suba a manejar ningún vehículo. De esa manera tendré alivio”, aseguró. Por otro lado, expresó que “el conductor de la camioneta se manejó de manera fría. Se bajó y miró alrededor para ver algún golpe y quisieron implicar a un tercer auto que no hubo. Dejó tirado a mi hijo”.
El otro hijo que perdió, en el año 2012, también fue en un accidente vial en nuestra ciudad mientras circulaba en un auto con unos amigos.

Leandro Barni – [email protected]