La fiscal penal cañuelense Norma Pippo pidió la elevación a juicio de la causa que investiga a un hombre que, en su carácter de abuelo, mantuvo contacto íntimo con una nieta en una casa del barrio Primero de Mayo, informó una fuente judicial.  

El hombre, abusó sexualmente de la víctima, hasta que la menor después de un tiempo pudo confesar lo que había pasado con su abuelo.  

Se trata de un hombre que en momentos de la denuncia tenía 69 años y por lo que fue detenido. Luego su defensa logró una excarcelación y llega al juicio en libertad.  

“La investigación dio sus resultados porque hay elementos para elevar el hecho a juicio y que se logre una condena”, manifestó un vocero e indicó que “los cargos están debidamente probados”.  

El caso tuvo en su momento bastante repercusión porque la madre de la criatura encabezó marchas y protestas en la Comisaría Primera y en la plaza San Martín. Inclusive lo hizo con otra mamá que también transitaba una situación similar.  

Según la madre de la víctima la nena fue manoseada por su abuelo paterno, llamado por apodo de ‘Topo’, en una oportunidad en que la niña quedó bajo su cuidado.   

En declaraciones a este medio en abril de 2017, la mamá de la chiquita dijo que “me contó que en una oportunidad en que la dejé con su abuelo cuando fui a la fiscalía para denunciar que mi hermanastro me quiso violar, ella se quedó con él y que el abuelo ‘Topo’ la violó. Tengo la declaración que hice en la fiscalía, eso fue el 12 de marzo de 2014. Me dijo que nunca dijo nada antes porque tenía miedo de que no lo creyéramos”.  

“Ella estaba en la cama durmiendo –recordó la denunciante– y cuando despertó el abuelo la estaba tocando con la mano y con eso que los hombres tienen abajo. A ella le dolía, pero no llegó a penetrarla. Ese día ella decía que le ardía para hacer pis, le puse crema, no se quejó más, pero en ningún momento imaginé que había pasado algo así”.  

A partir de la denuncia, y de que la niña lo revele, pudo mejorar su rendimiento escolar, por otro lado, obtuvo una restricción de acercamiento de 200 metros contra el denunciado J. A. que vivía a una cuadra de su casa.  

Es que según la madre se llegó a esa medida luego que “la actitud de este hombre fue de total aislamiento y desaparición. Hasta que empezaba a pasar por el frente y a hacer burlas frente a la nena, por eso pedí la restricción a la fiscalía. Ella entraba llorando a casa después de verlo”. Luego también destacó que tras organizar las manifestaciones callejeras le llegaron amenazas de allegados al denunciado por las redes sociales. 

Leandro Barni - [email protected]